Los besos

LOS BESOS

Es raro, lo es si el beso sabe a trecho
o a río; mas es claro si es de amor
o de alguien conocido, y si el color
es rojo, siempre acaba sobre el pecho.

No es algo de extrañarse que en el lecho
do viven dos amantes, su fervor
los lleve a pintar besos del color
del cielo, aquel que yace como un techo.

Los hombres no sabemos dar los besos
más suaves, pues las damas tienen bellas
sirenas en sus labios que complacen.

Mas pienso: “¡Qué placeres tienen esos
regalos!, que al tener esas estrellas
las otras cosas, sólo se deshacen.



10/Febrero/2009
ANDRÉS AMENDIZÁBAL

 

Expresa acertadamente, con precisión, desenfado, pulcritud y elocuencia, el gozoso poder que proporcionan los besos, maxime cuando éstos proceden de aquella persona que despunta en nuestra atención y forma parte de nuestras esperanzas más íntimas.

Excelente obra.

Saludos.

 

Son ricos, perfectos y quedan sellados en el alma, sobre todo esos que se dan con el alma, llegan intensamente y se quedan, un beso para ti muertito, y me emncanta verte de nuevo...Neny

 

Quien haya dicho que un beso es sólo un beso, claramente no ha sido besado como Dios manda.

Muy bien.

 

los besos frÍos y sin sabor no son besos de amor no crees cielo? Omaet

 

Muchas gracias Filósofo, te agradezco el comentario.

Gracias Neny querida por ese beso virtual y ese comentario afable

Exacto mi estimado, tenéis razón en lo que dictaminas