los maderos del Corán.

Desatame las ascuas
En aspas de molino,
que p' matar gigantes
no me hará falta beber,
ni empalmo el barrizal
ni empiedro los caminos,
p' que fermente el vino
antes de florecer...

Y quema el calendario
con lo que quede de día,
yo espantaré las moscas
que quieran relamer,
las sombras del cristal
esquinas revenías,
de sombras mal parias
que nos quisieron ver...

Que se embriaguen
los maderos del Corán,
si no dejan con cabeza
alguna flor,
en marmolina hecha copa
le dirán,
nunca nadie te ha querido
como yo...

Y la uva llega virgen
a madurar,
p' que la preñe de gemidos
cualquier sol,
en los buches de boticas
dormirá,
esperando a que germine
con calor...

Danzame las brasas
que apago tus infiernos,
y enhebra los ojillos
buscando un porvenir,
que tarde es p' llorar
sin siquiera dolernos,
con versos de cuadernos
si no puedo dormir...

y hay tantos revolcones
con la bragueta abierta,
p' que le den carnaza
y no saben silbar,
los cantos de sirena
oliendo solo a mierda,
y no se darán ni cuenta
que antes hay que llorar...

Que musiten los mullidos
que les di,
y le cuelguen medallitas
de cartón,
si en los brazos del insomnio
la perdí,
la almohada aún me tacha
de cabrón...

cuatro besos alguna vez
yo le pedí,
y entre tanto, el silencio
contestó,
adoquines una vez
barrí por ti,
y llenaste de escombros
mi corazón...

 

Un aplauso sonoro de pie!! Este poema es magistral!! Una belleza que me ha encantado recorrer.
Felicitaciones, poeta. ojalá le premien su poema. Lo merece, es una joya.
Saludos cordiales
Azalea.

 

Bellísimo tu poema, que merece doble comentario de mi parte. Mis aplausos!!