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Maxicleitor y la maquina del tiempo. Segunda historia.

Tema en 'Fantásticos, C. Ficción, terror, aventura, intriga' comenzado por sergio Bermúdez, 19 de Septiembre de 2009. Respuestas: 0 | Visitas: 1839

  1. sergio Bermúdez

    sergio Bermúdez Poeta que considera el portal su segunda casa

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    Después de aquella misión de la de los alienígenas, nuestro súper héroe Maxicleitor, seguirá dedicándose ha cumplir misiones. Pero esta vez no habrá aliens, habrá otras criaturas distintas, e incluso personajes que aparecerán a lo largo de la historia. Además la empresa Singspar Uniclec, se encuentra en la ciudad de Nueva York. Están en pleno siglo 31 y le pasan muchas cosas interesantes a nuestro súper héroe.

    CAPITULO 1: Un gran invento

    James se encontraba en la empresa Singspar Uniclec, donde el programa Word seguía creando cosas de última tecnología. El creador de Word quería hacer algo que superara sus últimos inventos.

    Entonces llamo a Maxicleitor, el hombre robot, para que le ayudara a crear lo que más ilusión le hacía.

    James: Maxi, quiero crear algo para poder fascinar a la gente y en el que también se puedan hacer cosas fantásticas.

    Maxicleitor: Déjame que mire dentro de mi mente robótica para ver que es lo que más éxito tendrá.

    Pensó unos cuantos minutos y empezó a sentir vibraciones por todo el cuerpo.

    Empezó a proyectar en el techo una maquina, en la que se podía comprobar muchas cosas interesantes.

    James: Increíble Maxi, ya se lo que quiere decir eso que me has mostrado. Quiere decir que podemos crear una maquina del tiempo para ir a diferentes épocas.

    Maxicleitor: Cuando viaje en el tiempo, me gustaría ver como se comportaban los dinosaurios en su época, también como era el Imperio Romano, el antiguo Egipto etc.

    James: Seguro que veras todo eso, pero primero tenemos que crear la maquina del tiempo.

    Estuvieron cinco meses haciéndola, hasta que por fin la terminaron.


    CAPITULO 2: Viaje hacía la época de los dinosaurios

    James y Maxicleitor estaban observando el gran invento que habían hecho. Era el gran momento de probarla, para ello James le dijo a Maxicleitor que se introduciera en la maquina del tiempo.

    Al introducirse, empezó a ver todos los botones que habían. Maxicleitor quería viajar a la época de los dinosaurios, para ver como se comportaban estos animales prehistóricos.

    Retraso el tiempo millones de años muy atrás y mientras que viajaba hacia el pasado, vio miles de imágenes de gente de cada época, que se le iban cruzando, conforme iba avanzando, a la época que había elegido ir.

    Cuando llego al lugar que quería, observo a los dinosaurios que estaban ahí, algunos eran carnívoros y otros herbívoros. Muchos de ellos iban en manadas, otros por su cuenta.

    Pero de pronto un Tirano Saurio Rex vio a Maxicleitor y fue detrás de el.

    Maxicleitor se elevo en el aire, pero de pronto, pasaron aves prehistóricas que eran muy grandes y tuvo que esquivarlas.

    Pero una de ellas le rozo el traje con sus garras y empezó a tener cortocircuitos. Callo al suelo y el Tirano Saurio Rex se lo podía comer, pero cuando fue hacerlo, se electrocuto y el paisaje se lleno de fuego, ya que por culpa del chispazo, los árboles empezaron a arder.

    Pero ese mismo día era el final de la época de los dinosaurios y Maxicleitor tenía que escapar como fuera de ese lugar.

    Contacto con James mediante un teléfono que llevaba incorporado en su pecho robótico, en el que llevaba un chip para poder comunicarse. A pesar de lo lejana que estaba la época de los dinosaurios, de la fecha que procedía nuestro súper héroe, se podían comunicar perfectamente.

    James: Maxi, tienes que intentar salir de ahí o sino puedes morir, ya que es la fecha en la que se extinguieron los dinosaurios.

    Maxicleitor: Estoy herido James, ya que unas aves prehistóricas, me rozaron el traje con sus garras afiladas y me han producido un cortocircuito.

    James: Tranquilo Maxi, mediante el programa Word arreglare tu traje, ya que haré que te lleguen unas ondas a tu cerebro y la energía se te conectara al cuerpo de nuevo.

    Maxicleitor: ¿Cuanto vas a tardar en hacerlo?

    James: Una media hora, aguanta por favor, no puedes morir Maxi, te necesito.

    Maxicleitor: Lo que se es que el paisaje esta ardiendo y según mi reloj, para que se extingan los dinosaurios quedan 31 minutos, o sea, que solo tengo un minuto para escapar y todo por un error que he tenido por poner esta fecha.

    James mediante el programa Word, le creo una esfera, para que no le pasara nada, mientras intentaba mandarle la energía.


    30 MINUTOS DESPUES

    James: Maxi, ya te e mandado la energía, corre, solo te falta un minuto para volver a tu verdadera época.

    Maxicleitor: Ok, voy en camino, tardare tres segundos en llegar a la maquina.

    Mediante una velocidad descomunal, llego como un rayo a la maquina.

    La conecto y mientras que iba hacía su época, veía como en su reloj, faltaba cada vez menos para que murieran todos los dinosaurios.

    Hasta que oyó una gran explosión, pero el ya estaba a salvo del peligro, llegando a su época sano y salvo.


    CAPITULO 3: Viaje hacia el antiguo Egipto

    Cuando llego a su época, vio a James mirándolo con una sonrisa de triunfo.

    Maxicleitor estaba satisfecho, ya que había escapado de la época de los dinosaurios.

    Pero estaba preocupado, ya que estuvo a punto de morir en la época prehistórica.

    James: Menos mal que has podido llegar sano y salvo.

    Maxicleitor: Pues la verdad es que sí, ya que por culpa de aquellas aves prehistóricas, he estado a punto de perder la vida.

    James: Si has podido sobrevivir, es porque estas hecho todo un súper héroe.

    Maxicleitor: James, si he sobrevivido ha sido gracias a ti, ya que me has mandado energía mediante el programa Word.

    James: Yo he hecho lo que he podido, pero gracias a tu súper velocidad, has podido llegar a tiempo.

    Maxicleitor: Cuando me convertiste en un hombre robot, hiciste que tuviera mucha velocidad, gracias a ti, es lo que soy ahora.

    James: Muchas gracias por decirme esas cosas, te lo agradezco de verdad.

    Maxicleitor: James, me gustaría viajar al antiguo Egipto, para ver como era aquella época.

    James: Me parece bien que vallas, ten cuidado, que sepas que yo, haré todo lo posible para ayudarte.

    Maxicleitor: Ok, muchas gracias.

    Maxicleitor se introdujo de nuevo en la maquina y llego al antiguo Egipto.

    Cuando llegó, vio a cientos de esclavos trabajando, para un faraón llamado Arankil. Sus trabajos consistían en hacer pirámides, ya que era lo que más le gustaba a este famoso faraón.

    Maxicleitor se dirigió hacía la pirámide del gran faraón, conforme iba avanzando, pudo ver como los esclavos estaban llenos de suciedad y además estaban heridos.

    Tenia que hacer justicia como fuera, entonces voló y se coló en una de las pirámides más grandes de todo el antiguo Egipto.

    Llamo a James mediante el teléfono robotico y le contó todo lo que estaba viendo.

    Maxicleitor: James, estoy en la pirámide de Arankil y estoy viendo muchas injusticias, tengo que intentar hacer justicia.

    James: Maxi, yo te entiendo, pero debes comprender, que lo que estas viendo, es parte del pasado, tu solo puedes observar como se comportaban en aquellos tiempos.

    Maxicleitor: ¿Entonces si me atacan que hago?

    James: No te preocupes, te ayudare en lo que pueda, mediante el programa Word.

    Maxicleitor: Muchas gracias James, pero ahora mismo me pueden descubrir, ya que estoy en la pirámide, de uno de los faraones, más importantes del antiguo Egipto.

    James: Estate tranquilo Maxi, puedes concentrar toda tu energía y expandir mediante tus ondas, una luz, que hará que te hagas invisible, pero deberás permanecer, una tres horas sin que te descubran.

    Pero de pronto, en medio de la conversación telefónica, lo vio una faraona que era muy guapa. A Maxicleitor le recordaba a su esposa fallecida, ya que eran muy parecidas las dos.

    La faraona se acerco a donde el estaba, lo miro a los ojos y le pregunto que quien era. El la miro también fijamente y corto la llamada, diciéndole a James, que luego lo llamaría.

    Maxicleitor: Soy Maxicleitor, un hombre robot que procede del futuro.

    Faraona: ¿Qué significa la palabra robot?

    Maxicleitor: La palabra robot, significa, que soy una maquina. No soy como las otras personas que ves.

    Faraona: Es la primera vez que veo alguien como tú, la verdad, es que parece un sueño, todo lo que estoy viendo y sintiendo.

    Maxicleitor: Yo antes de ser robot era humano, lo que pasa es que a mi esposa, la asesinaron y mi corazón se empezó a poner muy débil, pero gracias a un programa informatico que tenemos llamado Word, pude transformarme en un hombre robot, capaz de hacer justicia.

    Faraona: Impresionante, la verdad es que me quedo alucinada con tus palabras.

    Maxicleitor: No se lo vallas a decir a nadie, si te lo he dicho a ti, ha sido porque me has dado una buena impresión y porque me has descubierto, no quería que nadie me viera, quiero que me lleves a un lugar seguro, para que nadie más me descubra.

    Faraona: Te llevare a la pirámide de la media noche, la llaman así, porque solo entra gente que busca la meditación, para pensar en su vida. Y como la luz del sol, nunca da dentro de ella, pues la oscuridad, ayuda a que tu mente, este más concentrada.

    Maxicleitor: Muchas gracias por tu amabilidad, seguro que allí, no me descubrirá nadie.

    Llegaron hasta la pirámide de la media noche, por fuera era muy bonita, ya que te relajaba al mirarla, pero una vez que estabas dentro, la oscuridad se extendía, por todo el lugar, en el que te encontrabas.

    Una vez que Maxicleitor estuvo dentro de la pirámide, se arrodillo en el suelo y se puso a concentrar toda su energía, para hacerse invisible.

    La faraona al verlo ahí concentrado, le dijo: Maxicleitor, yo ya e cumplido con lo mío, ahora te dejare que te concentres en lo que quieres conseguir. Me gustaría verte otra vez algún día.

    Maxicleitor: No te preocupes, seguro que antes de irme a mi época, nos volveremos a ver, también quería decirte, que me recuerdas a mi esposa.

    Faraona: Seguro que ella era más guapa que yo.

    Maxicleitor: Sois las dos muy guapas, prácticamente iguales.

    Una vez hablaron, la faraona se fue y Maxicleitor se quedo concentrándose, para poder hacerse invisible.

    TRES HORAS DESPUÉS

    James le mando la energía a Maxicleitor, para que se pudiera hacer invisible. Cuando lo consiguió, se dirigió a la pirámide de Arankil, para ver como era en aquella época este faraón.

    Una vez hubo llegado allí, lo vio sentado en un gran sillón, donde estaba cubierto de muchas joyas, pero nuestro súper héroe, no se esperaba una cosa que iba a ver a continuación y era, que la faraona que había estado con el hablando, era la esposa de Arankil.

    Maxicleitor tenía confianza en aquella mujer, ya que la impresión que le dio, era excelente. Pero estando allí, los vio discutir a ambos.

    La faraona se llamaba Lunexia y empezó a decirle a Arankil lo siguiente:

    Lunexia: No quiero seguir a tu lado, no me gusta como tratas a los esclavos.

    Arankil: Que más te da como los trate, lo importante es que trabajen para nosotros.

    Lunexia: Pues a mi no me parece justo, estoy en contra de cómo haces las cosas.

    Arankil: No te habrás enamorado de otro hombre, ¿verdad?

    Lunexia: Pues la verdad es que no, ¿porque me lo preguntas?

    Arankil: Te lo pregunto, porque te noto rara.

    Lunexia: Pues estas muy equivocado, yo quiero dejarte, porque no me gusta como tratas a la gente.

    Arankil: Ahora mismo voy a llamar a mi gente de confianza para que te encierren, te vas arrepentir de lo que me has dicho.

    Pero antes de que pasara todo eso, una fuerza invisible, empezó a destruir, todo lo que había en el salón de Arankil, esa fuerza invisible era Maxicleitor.

    Arankil no se creía lo que estaba viendo, pues no sabía como actuar, aunque James le dijo a Maxicleitor que no podía actuar, porque esa época formaba parte del pasado para el. El no pudo controlar la furia que sentía, ya que se había enamorado de aquella faraona, que le recordaba a su esposa.

    Cogió a Lunexia y se la llevo a donde nadie le pudiera hacer daño, avisándole que era el. Le explico, que se había hecho invisible, para poder ver como se comportaba en aquella época Arankil, pero el no se esperaba, que ella fuera su esposa.

    Mediante una velocidad imparable, el aire se quedaba sellado de la magia de nuestro súper héroe. James contacto con el y le dijo, que no podía llevarse a Lunexia, a la época en la que el pertenecía, ya que ella, formaba parte del pasado.

    Maxicleitor: Me gustaría que viniera conmigo James, ya que me he enamorado de ella.

    James: No puede ser que te hallas enamorado de ella, recuerda que estas en el pasado, ella en nuestra época actual no aguantaría, ya que no esta acostumbrada, a nuestra forma de vivir.

    Maxicleitor: Pero el amor lo puede todo, además me recuerda a mi esposa.

    James: Elige entre quedarte allí para siempre o volver a tu actual época.

    Maxicleitor: Pues me cuesta elegir, tendré que pensarlo bien.

    James: Esta bien, pero ya sabes que si te quedas ahí, siempre vivirás en el pasado, si vuelves a tu verdadera época, podrás vivir el momento.

    Empezó a pensar en todas esas cosas, al final tuvo que decidirse a volver a su actual época, ya que la gente de allí, lo necesitaba más que nunca.

    Maxicleitor: La verdad es que me gustaría estar contigo para siempre, lo que pasa es que esto forma parte del pasado para mí.

    Lunexia: Yo te entiendo, pero jamás me voy a enamorar más así de alguien.

    Maxicleitor: Seguro que te vuelves a enamorar de otro, yo soy del futuro y tengo que regresar a mi destino.

    Lunexia: Esta bien, como quieras, pero quiero decirte, que jamás te olvidare.

    Maxicleitor: Lo mismo te digo.

    Una vez que ya sabía lo que tenía que hacer, cogió la maquina del tiempo y volvió a su verdadera época.


    CAPITULO 4: Viaje hacia la época de los piratas

    Una vez llego a su época, Maxicleitor le dijo a James, que había decidido volver, porque a pesar de que se había enamorado, de aquella faraona llama Lunexia, el tenía que volver, a su verdadera realidad.

    James: Has hecho bien en volver, porque si te hubieras quedado ahí, no te hubiera ido bien.

    Maxicleitor: James, ahora me gustaría viajar a la época de los piratas, ya que son unos personajes de leyenda, igual que los del antiguo Egipto.

    James: Esta bien, pero que no te vuelva a pasar como antes, vale.

    Maxicleitor: Seguro que no me vuelve a pasar.

    Una vez haberle dicho eso a James, cogió la maquina del tiempo de nuevo y fue a la época de los piratas.

    Cuando llego se hizo invisible, ya que una vez que Maxicleitor había recargado energía anteriormente, podía hacerse invisible cuando quisiera, solo que la energía que tenía para hacerlo, era como una batería, ya que cada vez que la utilizaba, se le iba gastando.

    Tenía que utilizar esa energía de vez en cuando.

    Maxicleitor se encontraba en un barco pirata, observo como los piratas, estaban bebiendo, botellas de Ron.

    Iban a una isla llamada porkisara, en el que decían de ella en aquella época, que había muchas cosas valiosas.

    Una vez que Maxicleitor ya sabía donde iban los piratas, solo tuvo que tener paciencia, para poder ver, como actuaban los piratas en esa época.

    No tardaron mucho en llegar a la isla, cuando llegaron, empezaron a buscar a gente rica, para que les dieran cosas valiosas, a cambio de una recompensa.

    Pero hubo algo que a Maxicleitor no le gusto y era que en aquella isla, vivía un chico que era muy pobre y estaba trabajando para gente rica. Además tenía que darle a esa gente, todo lo que le pedían, para poder sobrevir. Les daba las cosas valiosas que había en aquella isla. Si no les daba a la gente de poder, todo lo que le pedían, lo amenazaban con matarlo.

    Entonces Maxicleitor dejo de ser invisible y miro a ese grupo de personas. Cuando ellos, lo vieron a el, se quedaron todos boquiabiertos, incluido el niño.

    Maxicleitor: Dejad al niño en paz, ¿que os ha hecho el?

    El grupo de gente rica le dijo que quería que les consiguiera cosas, ya que conocía los sitios mejor que ellos.

    Maxicleitor los miro fijamente y les dijo: Además lo amenazáis con matarlo, eso no me parece bien de vuestra parte, si estuvierais en donde yo vivo, estaríais en prisión, me gustaría que me dijerais quienes sois.

    Uno de ellos se presento, diciendo lo siguiente:

    Me llamo Sebastián y trabajo para los piratas que vienen a esta isla en busca de fortuna, a cambio de darles yo lo que ellos buscan, ellos me dan mucho dinero, para que yo pueda vivir, la vida que a mi me gusta.

    El segundo que se presento dijo: Yo me llamo Loesink, también trabajo para los piratas de estos mares.

    En realidad todos trabajaban para lo mismo y eran ricos, porque vendían todo lo que tenía valor, a los piratas.

    Los otros se llamaban: Jonas, Jazilim, Leandro y Esteban.

    Maxicleitor: Yo os guiare por los sitios que hallan joyas, pero si me prometéis, que no le haréis más daño al chico.

    Ellos al unísono respondieron: Pero tú no eres de aquí, ¿como lo puedes saber?

    Maxicleitor: Lo se, porque tengo instalado en mi cuerpo, un chip que me dice lo que quiero buscar. Si queréis, os hago una prueba.

    Ellos asintieron y Maxicleitor les mostró una de sus virtudes. Vieron como mediante sus ojos, les iba proyectando en la arena, unas cuevas en el que se podía observar, como si de una película se tratara, un montón de imágenes. Ellos no se lo podían creer y le preguntaron, que de que planeta venía.

    Maxicleitor: Lo único que quiero, es que dejéis en paz al chico.

    Sebastián: Después de habernos enseñado el camino para llegar hasta ahí, lo dejaremos tranquilo para siempre.

    Maxicleitor: Eso espero, ahora os daré un mapa, para que siempre sepáis, donde están las cosas que buscáis.

    Los ricos al unísono dijeron: Muchas gracias, menos mal que te hemos conocido.

    Maxicleitor: Lo único que quiero que sepáis, es que ahí que hacer el bien en el mundo.

    Maxicleitor fabrico el mapa, mediante su cuerpo robotizado y se lo dio a ellos.

    Una vez habérselo dado, la gente rica se fue, dejando a Maxicleitor y al niño pobre solos.

    Maxicleitor: Ahora ya puedes ser feliz de nuevo, nadie te amenazara más, por cierto, ¿Cómo te llamas?

    El chico lo miro con ojos nobles y le respondió, que se llamaba Juaniref.

    Juaniref: Muchas gracias por salvarme la vida, por cierto ¿Cómo te llamas tú?

    Maxicleitor: Me llamo Maxicleitor, soy del futuro y además soy un hombre robot.

    Juaniref: Qué interesante, me gustaría ir a tú época, a ver como es.

    Maxicleitor: No puedes hacerlo, ya que perteneces al pasado.

    Juaniref: Me gustaría que me contaras, como sois en el futuro.

    Maxicleitor: En la época que yo vivo, la robótica es una de las cosas más importantes.

    Juaniref: O sea, que hacen robots como tú.

    Maxicleitor: Exacto, pero de todos los que han hecho, yo soy de los qué más éxito han tenido al hacerlos. Porque todos los que han hecho solo son robots, yo aparte de ser robot, soy humano.

    Juaniref: Qué interesante, la verdad es que me dejas alucinado.

    Maxicleitor: Todos me dicen lo mismo jejeje.

    Una vez que Maxicleitor hablo con el niño, vio a un grupo de piratas, que estaban buscando a la gente rica, para que les dieran los objetos de valor, a cambió, los piratas les daban mucho dinero.

    A Maxicleitor le quedaban tres minutos para volver a su época, ya que tenía un límite de tiempo para regresar, porque si pasaba el tiempo y no cogía la maquina del tiempo, podía quedarse allí para siempre atrapado en el pasado, ya que nunca podría utilizarla más.

    Se hizo invisible y sobrevoló la isla, hasta llegar a la maquina del tiempo.

    Una vez que la cogió, puso en la pantalla su época actual y llego a su destino, lo más rápido que pudo.


    CAPITULO 5: La maquina del tiempo se rompe

    Una vez que llego a su época, James le dijo a Maxicleitor, que ya había viajado bastante y que ahora tenía que estar en su época, ya que era más importante vivir el presente, que el pasado.

    Pero algo paso y fue, que la maquina incomprensiblemente, empezó hacer ruidos extraños.

    Maxicleitor: James, ¿que esta pasando?, ¿Por qué hace la maquina esos ruidos tan raros?

    James: Puede ser que como la hemos utilizado tanto, ahora esta sobrecargada, necesita un descanso.

    Pero antes de que pudieran decir algo más, empezaron a salir de la maquina gente de todas las épocas, o sea Piratas, dinosaurios, gente del antiguo Egipto, hombres de las cavernas, gente del imperio romano etc.

    La avalancha fue tal, que se apoderaron de toda Nueva York, era un caos total.

    Pero nuestro súper héroe tuvo que actuar, voló por el cielo y vio como los piratas, le estaban disparando, con sus pistolas, a gente inocente.

    Bajo del cielo como si de un rayo se tratara y empezó a luchar contra cualquier rival, que se le ponía por delante. Había una momia viviente, que empezó ha atacar a un niño indefenso, el caos empezó apoderarse de toda la ciudad de Nueva York.

    Mientras que el programa Word se mantuviera intacto, Maxicleitor podría seguir siendo, el gran súper héroe, que todos conocían.

    Un grupo de dinosaurios, se estaban metiendo por las tiendas de ropa y los clientes salían disparados a la calle gritando sin parar.

    James tuvo que llamar a los otros robots, para ponerles en sus zibercuerpos un chip, que les hiciera congelar el tiempo, para así, detener la gran avalancha, que se estaba produciendo.

    Mientras tanto, Maxicleitor con una velocidad que rompía la barrera de sonido, hacía que todos los piratas, dinosaurios, Egipcios, Romanos etc, se arrinconaran, en el centro de la gran ciudad de Nueva York.

    Es entonces cuando los robots Galletoide, Pinpinoide, Eskiloide etc, empezaron a actuar, congelando a todos, los que estaban produciendo, el caos en la ciudad.

    Maxicleitor abrió la mano y señalo al cielo, para darle señales a James, de que los habían congelado a todos, pero la maquina del tiempo, tenía que arreglarse, para que ellos, pudieran llegar a sus épocas.

    James mediante su teléfono especial, empezó a decirle a Maxicleitor lo siguiente: Maxi, tenemos que arreglar la maquina del tiempo, ya que si no la arreglamos, empezaran a descongelarse y será el fin de todo.

    Maxicleitor: ¿Cómo podemos arreglar la maquina?

    James: Mediante el programa Word, intentare dispararle un flash a la maquina, para ver si así, se puede arreglar.

    Maxicleitor: Esta bien, pero no tardes mucho, ya que les queda poco para descongelarse.

    Paso un tiempo, hasta que la pudo arreglar, gracias al programa Word, ya que fabrico como una especie de rayo, que le dio a la maquina, es entonces cuando James, aviso a Maxicleitor.

    Después de recibir la noticia, Maxicleitor alzo el brazo, pronuncio unas palabras en idioma robotico y como si de un imán se tratara, todos fueron hacía la maquina del tiempo. La gente normal estaba súper asustada, ya que no tenían ni idea, de como había podido suceder todo eso.


    CAPITULO 6: Todo vuelve a la normalidad

    Una vez que paso el gran susto, todo el mundo fue a la empresa Singspar Uniclec.

    Es entonces cuando llego Maxicleitor y empezó a explicar a la gente, todo lo ocurrido.

    Todo el mundo lo entendió, además, la gente, era la primera vez, que veían una maquina del tiempo. Eso hizo que James, se hiciera más famoso todavía de lo que era y que Maxicleitor siguiera siendo todavía, el ídolo de grandes y pequeños, ya que había una cosa, que los distinguía de los demás robots y era, que aparte de ser robot, era también, una persona humana.
     
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