Me das flores cuando te doy espinas

I

-¿Estás bien?
- … (¿Qué crees?)
-¿Eh?
-HmmÂ…
-¿¡Eh?!
-Â… (No sigas, por favor)
-¿¡Eh?!
-Â…
-Â…

II

“¿Estás bien?”, le preguntó, pero él no respondió, ni siquiera volteó a verla. Ella insistió. Tres veces intentó obtener una respuesta, él no hizo más que mirar al vacío y callar.

III

-“¿Estás bien?”, me preguntó. Yo no dije nada y mientras me resolvía entre decirle, entender qué sentía yo, entender lo que había pasado o mil cosas más sin sentido alguno, ella insistía: “¿Eh?... ¿Eh?... ¿Eh?”. Sentí como me hundía lenta, húmeda y cálidamente en un pozo del que, incluso siendo aún tan temprano, ya sabía que nadie podría sacarme.
Supongo que no debería haber pensado que podría ser normal algún día sólo porque “todo es posible”, algunas personas nacemos rotas.

 

a veces el cariño es mas fuerte que los azotes, muy buena obra sobrino, besos

 

Eso exactamente es amar a una persona y desafortunadamente no sabemos conocer el amor aún y estando frente a nuestra naríz, que no nos extrañe el por que sufrimos por falta de amor.


Un gusto leerte, gracias.

 

Posibilidades abiertas de referirse a cualquier tema;
un rompimiento, un accidente, un encuentro...
no das luces de ser una historia de amor...
Los matices constituidos en el relato
navegan en la maraña de sensaciones...
Noto cierta contradicción en usar los adjetivos
húmedo y cálido para acompañar a la lentitud con que transcurre
el sopor de no encontrar respuesta.

Gracias por compartir.

 

Leo: ¿Estás bien? jajaja
en cualquier circunstancias el no entendimiento o falta de comunicación (el no decir lo que se siente) siempre deja esa incertidumbre de no saber que carajo sintió uno y el otro... RE BIENVENIDO, me encantó leerte y escuchar esa cancíón.
Saludos.

 

oye no habia leido esta forma de expresar aqui
interesante chicuelo