Me siento envenenado…

Me siento envenenado…

Si así como lo lees, esta vez me siento envenenado, hoy has colocado una jeringa llena de acido en mi venas con sentimientos de ardor, desprecio y odio, me arrepiento una y mil veces por maldita sea haberte conocido.

Mentiría al decirte que me siento aliviado por haberte dejado ir, pero los recuerdos de traiciones son permanentes en mi subconsciente, rencor a la vida por haberte puesto en mi camino y mi corazón quiere de una vez por todas dejar de latir, para no sentir de nuevo lo que los idiotas llaman amor y dejar de vivir esta vida vacía llena de mentiras y engaños, para mi suerte o quizás mi fortuna, mi razón me detiene antes del suicidio, por que simplemente TU NO VALES LA PENA para morir.

¿Acaso disfrutaste ser poseída por sus manos?

¿Acaso pensabas en el al rozar nuestras pieles?

¿Acaso tus palabras fueron alguna vez realmente sinceras?

¿Acaso tu maldita lujuria pudo mas que el amor que sentía y que mandaste al demonio?

Como escuche alguna vez en una tonada de piano y rimas casi sin sentido, maldito sea el día en el que la sensibilidad llego a mi vida, yo lo cambiaria por, MALDITO SEA EL DIA EN QUE TU NOMBRE Y TU EXISTENCIA LLEGARON A MI VIDA; fuiste por mucho tiempo quien valía la pena para agarrar tus manos y entrelazar los dedos, ahora solo eres quien cicatrizo mi pecho.

En este me siento sucio, me siento realmente asqueado cuando llega a mi memoria el sabor tu cuerpo cuando lo unías con el mio, seguramente era palpado por las constantes caricias de la traición, sin verte puedo recrear la escena donde fuiste suya, el odio me palpita la sangre de tan solo pensar que estando conmigo, en tu mente estaba aquel fulanito de tal.

Profunda fue la punta de la inyección que utilizaste para esparcir veneno en mi interior, estoy alucinando pero creo que borra mi mirada y me lleva solo a tu imagen, enloquezco pero puedo sentir mis venas hinchándose llenas de veneno Maquiavelo, me encantaría darte la mano y empujarte en fuego para ver si así , de una vez por todas tu recuerdo desaparece.

Que decepción y que desanimo, en tu nombre me daban ganas de ser un puto hombre de bien, pagaría por abrirme el pecho y como lo haría cualquier psicópata, arrancarme el pedazo de corazón que llevaba tu nombre, así muera en el intento por desangrarme, o simplemente por que sin corazón no se vive.

El liquido ya llego a todas las partes de mi inerte cuerpo, quema mi sangre volviéndome frio, hace que los latidos se detengan y mi cerebro se vuelva cada vez mas retorcido, ya basta de desahogarme por quien no se lo merece, ni siquiera he derramado lagrimas y tampoco lo hare.

¿me volviste frio?

Si, lo admito.

Solo no me toques y desaparece.

No, ni se te ocurra abrazarme, porque como dije al principio de esto, MALDITO SEA EL DIA que te conocí, vete a regalar besos, que yo buscare como contrarrestar el veneno que hoy en día has dejado dentro de mi…









Yojham Fernández