Memorias de la Estrella

En la cima del agua
estabas tendida,
como un reflejo simple
de tu alma constelada.
En brazos del rocío
cantabas y reías,
amado tu destino,
despertando tus alas.
Y me dejo llevar
por la elegancia,
de las aguas
corriendo hacia el oriente,
y un pequeño papel
en la corriente,
te deja el alma tibia,
perfumada.

Lejanos pájaros marchan,
regando el ancho mar
de arenas y pañuelos,
de estrellas y de espadas.

Más tu cielo es mi cielo.
Y tu paz es mi calma.
Porque sos vos.
Porque sos pueblo.

El sol se rinde
en una muerte roja.
En el puerto alguien parte.
Hacia dónde irán
esos barcos en el cielo?

 

Muchas gracias por la lectura.
Abrazo para ti también.
Buena noche.

 

Romántico y soñador poema que interroga a los cielos...

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Hola.
Muchas gracias por la lectura y comentario.
Abrazo grande.