Mi verdadera vocación

Ya lo pense bien y en este instante he vislumbrado mi verdadera vocación,
quiero ayudar a Dios con la decoración del mundo
y que parte de mi trabajo sea el de crear las flores
y nuevos paisajes.


Podria viajar por todo el mundo en busca olores, sentimientos, sabores y
emociones que me inspiren a hacer cosas bonitas.


Al desierto le pondría muchos oasis y palmeras que dieran cocos y piñas una excelente combinación,
la arena fuera como un suave masaje y el sol bronceara la piel de las personas de un mismo color.


Mi trabajo incluiría sin inconvenientes pintar arcoiris con más colores, con diferentes formas.
Las nubes las haría más espongosas y les dejaría el color rojizo al final del dia,
habría en las montañas deliciosos dulces para los que con tezón y esmero llegaran hasta la cima.


Pondría una cascada en cada pueblo, nadie debe de perderse ese espectaculo maravilloso,
el agua de los ríos por ley serían azulados con toques de verde dependiendo del sol.


Inventaría el color invisible para que los animales se camuflagen y no sean cazados por el hombre.


Le pediría a Dios que ponga en circulación nuevamente el mana para que la gente no muera de hambre;
por gusto propio habría naranjas, mangos, cocos, platanos, piñas, uvas y manzanas todo el año y en todo el mundo, mmm podría agregrar a la lista higos y kiwis para uno que otro amigo.


Limpiaría el cielo como una bola de cristal, quitaría el smoke para dejar un cielo despejado y noches estrelladas,
[COLOR=black]algunas veces pondría espectáculo de luces con tormentas eléctricas y solo una vez al año la aurora boreal se vería en todos los paises.[/COLOR]


[SIZE=4][COLOR=black]Sí, quiero ayudar a Dios con la decoración del mundo[/COLOR][/SIZE]
[FONT=Georgia][SIZE=4]es el trabajo perfecto para mi.[/SIZE][/FONT]

 

Bonita sería esa vocación, pero, hay que poner los pies en el suelo y saber lo que se esta pisando. Me gustó tu prosa. ABRAZOS