Monólogo in-exterior

Llaman a la tierra,
la respuesta eres tú, que lees entre líneas.
Mientras un ente extraño te invita a divagar.

La llamada continúa después de 365 días.
Y ésta no se paga en dinero
si no en sacrificio, trabajo, llanto.

Que no busca escusas,
ni frías promesas.
Busca valor.
Y en su sombra encuentra ,
angustia y tristeza.
Dolor e impotencia.
Y hasta, por desgracia, la muerte.

El fuego arde una vez más.
Con la leña húmeda
que nos recuerda a corazones rotos.
Y esa ténue luz vuelve a apagarse.

Los focos que desenfocan victorias,
y desfiguran los logros.
Injustamente.

Para bajo las tinieblas poder resurgir.

Y gritar.

Una y las veces que hagan falta
por la igualdad.