Negra

Me viste iniciar la adolescencia, cuando me aferraba aun a mi adorada infancia que tanto ame, era una ciudad nueva y no me gustaba para nada, la gente me parecía siempre de mal de genio y el clima me sofocaba. Era más niña que mujer, flacucha y alargada, y no hacía amigos con mucha facilidad.

Has estado ahí siempre, y creo que de alguna manera pensé que siempre lo estarías, hasta te llegue a incluir en mi plan de vida para el futuro, y te imagine viejita y amorosa en una camita hecha a tu medida o durmiendo a mis pies, para ello tendría que robarte de los brazos de mi madre, pero ya pensaría en algo. Cuando por mi mente pasaba que tal vez no vivieras para irte conmigo inmediatamente desechaba la idea, tu siempre estarías ahí para mi, siempre lo habías estado.

Sentía que me entendías mas allá de lo científicamente explicable, hacías caso a todo lo que te decía, y a veces me mirabas con ojos llenos de ternura y yo no podía decirte que no, o con un gesto en la mano te indicaba "Esta bien, sube" y te sentabas junto a mí en mi cama y yo te abrazaba y te decía que te quería y me volvías a mirar con amor y nos entreteníamos en graciosos juegos donde te tapaba con la sabana e intentabas liberarte o escondía mi cara entre mi cabello y tu lo perseguías ferozmente, creo que nunca dejaste de tener espíritu infantil, como yo y tal vez por eso nos entendíamos tan bien.

Incontables son los días en que te quedaste toda la noche junto a mí, y los momentos en los que estaba triste y te acercabas y yo te decía "¿Verdad que tu si me quieres?" y tú me aventabas tus patitas para sentarte en mi regazo, y estando contigo olvidaba los problemas que agobiaban en mi mente y las tristezas que oprimían mi corazón.

Conocías todas mis actitudes, viviste todos mis cambios, desde la insegura y tímida niña que fui en la secundaria, a la adolescente encerrada en sus libros, sus amigas y sus campamentos, a lo joven universitaria llena de ilusiones y esperanzas, y la graduada en su primer trabajo de verdad, yo quería que tuviéramos mas momentos juntas, pero ya no podrá ser así, de cualquier manera, agradezco todos estos años en que me hiciste compañía, se que solo eras una perrita, una mascota, pero para mi... siempre serás familia...

Te extraño Negra