Ni bueno ni malo

La mujer que creó el caparazón.
Intentar confundirme a base de figurarse traumas que podrían conducirme al suicidio.
Lo que de verdad cuenta es que me importa un carajo estar en lo correcto o en lo incorrecto.
Vida o muerte.
Nadie me fustiga para que siga escribiendo.

La cuestión es que soy yo el que se lanza al vacío.
Y, con tal condición, sé de sobra que no sirve de nada.
Nada aquí en realidad sirve para algo.

Con las personas sucede lo mismo.
Así las cosas, lógico que quieran deshacerse de mí.
Hay millones de formas de hacerlo.

Sin embargo, han mordido el anzuelo.
Han tomado contacto con mis letras.

Nada volverá a ser igual.
La literatura es un antes y después de mí.

¿Egocentrismo?
A ello se le llama claridad de ideas.

¿Esperaban acaso contradicciones?

"Si pensaran como yo, no les quedaría más remedio que quitarse la vida.
Colgarían la pluma, se sentirían culpables, pensarían que el mundo está en su contra."

Pero yo voy más allá.
"Si no han pensado así en millones de años, ¿de qué ha servido dios como doctrina?"
​

 

Bien lo considero, mas lo de quitarse la vida es un error porque volverás en iguales circunstancias, aunque no te acordarás de las anteriores, hasta superarlas. Hay quey tratar de romper las cadenas que te atan al sufrimiento.
Cordiales saludos .
Castro.