No te apasiones…

No te apasiones…

Nunca compares...

lo bueno con lo !chido!​

En gustos se rompen géneros… pero, ¿y si el gusto es inmensurable, qué poco o nada importa el qué dirán? Eso, ¿en qué me convierte? ¿En egoísta? ¿Desconsiderado? ¿Irresponsable? ¿O simplemente alguien que sabe lo que quiere? La verdad es que no importa qué tan grande sea el gusto ni qué tan bueno pueda parecer. Lo que realmente importa es entender que estamos rodeados de inmensidad. En esa inmensidad podemos toparnos con un caleidoscopio de formas de pensar, sentir, decir, actuar y amar. Es ahí donde radica el verdadero aprendizaje: en aceptar, respetar y, por qué no, admirar esa diversidad. Porque la vida no se trata solo de lo bueno, de lo estándar, de lo que todos consideran correcto. La vida también se trata de lo chido, de aquello que resuena contigo de una forma única, auténtica, inigualable. No te apasiones con lo bueno, porque lo bueno, al final, es subjetivo. Apasiónate con lo chido, con eso que te mueve, que te inspira, que te hace sentir vivo. Y más allá de eso, apasiónate también por descubrir qué es lo chido para los demás. En esa búsqueda, encontrarás no solo respeto hacia el otro, sino una conexión más profunda con la inmensidad que llevamos dentro. Porque, al final, lo chido es lo que nos une, lo que nos define, lo que nos hace humanos. Así que sí, rompe esquemas, cuestiona lo que te enseñaron sobre “lo bueno”, y encuentra lo chido en cada rincón del mundo. Solo entonces estarás viviendo, no solo existiendo.



Crédito de la frase: A quien corresponde.


Te invito a disfrutarlo en el formato de video, solo espero que sea de tu agrado, gracias.