1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Nuevas para el mundo

Tema en 'Poemas Filosóficos, existencialistas y/o vitales' comenzado por Ricardo López Castro, 10 de Septiembre de 2020. Respuestas: 0 | Visitas: 189

  1. Ricardo López Castro

    Ricardo López Castro Poeta adicto al portal

    Se incorporó:
    17 de Septiembre de 2017
    Mensajes:
    1.886
    Me gusta recibidos:
    1.419
    Género:
    Hombre
    [​IMG]

    Puede ser que mi estilo no encaje en la asiduidad del color, de las emociones.
    Quizá sea un desgaste emocional.
    Solo quizás.
    Y en cierta manera deba hacer algo diferente para obtener distintos resultados.
    Pero estoy satisfecho de cómo he llegado hasta aquí.
    Es más, estoy orgulloso de mí mismo.
    Muchos dirán, incluso algunos me dijeron, que he malgastado mi vida en pedradas y en tonterías.
    Pero yo no lo pienso así.
    Y no es una falta de respeto hacia los profesionales de la psicología, ni mucho menos.
    Es como soy.
    No me pregunto cosas, porque de todas las veces que lo he hecho, he obtenido respuestas.
    ¿Qué sentido tendría pues, abrir el abanico de las posibilidades?
    Estos últimos años se me han pasado del tirón.
    Hay quien dice que tengo talento para la poesía.
    Por no engañar, quizá.
    No es que no me crea lo que me comentan sobre ello.
    Simplemente, he establecido un orden de prioridades.
    No tiene nada que ver con mis puntos débiles -Ojalá encontrara alguno para volver a amar.-.
    Simplemente es la duda de hacia dónde he de cambiar el mundo.
    Sé que puedo hacerlo.
    Mis conductas secundan mis pensamientos.
    Mis letras más perversas no son autodestructivas.
    No estoy hecho para fiarme de nadie.
    ¿Qué sentido tendría hacer eso cuando nadie tiene las ideas claras?
    Dicen que las ideas fijas son síntomas enfermizos.
    Y yo me pregunto, ¿hay algo más loable que mostrar la identidad real de uno mismo?
    ¿Qué importa cuántos la vean, o adónde vaya a parar?
    Jamás les abandonará.
    No tengo un lado oscuro, sino una necesidad de equilibrar la balanza.
    No se puede vivir dando todo masticadito.
    Mi generosidad, mi altruismo, se corroe cuando estoy a solas.
    No tengo razones para pensar, literalmente.
    Ergo, escribo.
    La severidad de mis textos íntimos carece de humanidad.
    Ello siempre me conduce a Dios.
    ¿Por qué tuvieron que averiguar lo que el hombre pensaba hace millones de años?
    Me resulta, cuanto menos, espeluznante.
    No tiene nada que ver con las cavilaciones actuales.
    Nos vaciamos de creencias, justo para que esto no pase.
    Pero si Dios existiera, seguro que estaría en mi pellejo, en el de mis letras, y en de todos ustedes.
    Es por ello, que abro la mente todo lo que puedo.
    No para creerme Dios, sino para serlo.
    Nada tiene sentido sin ello.
    Y si Dios realmente existiese, habría motivos para echarse a temblar, o simplemente para coexistir.
    Es más, si Dios existiese, todo lo demás sería una evidencia.
    Ya que Él es la raíz de la confusión.
    Dios no divide al mundo, lo unifica, aunque sea para derruirlo.
    "Les he contado todo lo que sé, lo demás depende de ustedes".
     
    #1

Comparte esta página