Parte del todo

PARTE DEL TODO

Sentado en un viejo sofá de terciopelo negro, en esta antigua casa esta larga noche, bebo un sorbo de té servido en una taza negra, como lo es de negra la triste noche y detrás de mi una lámpara lanza su luz sobre mi ser, dejando que en la pared crezca mi sombra tan negra como la taza.

Bebo otro sorbo de té, té contenido en la taza, taza apoyada en mi mano, mano unida a mi cuerpo y mi cuerpo en este mundo físico. Todo reunido, todo parte de un solo elemento y yo, yo deseando estar lejos, ajeno, fuera de todo esto, pero no puedo aunque así lo desee. Es imposible emanciparse del universo que me rodea. Entonces pienso, me sumerjo en las profundidades de la mente, me hundo en los abismos de la conciencia alejándome de este mundo material.

Y ahora ya sin recocer lo que me rodea, sin entender que soy, ¡Por fin se que soy libre! No siento, no vivo, no muero, soy una idea… solo pensamiento. Soy el éter intangible que aun así da forma a todo ente en el universo, soy roca, agua, viento, fuego, planta, animal, persona, planeta, estrella, galaxia… universo, soy infinito. Por fin soy parte de nada y a la vez de todo, ahora y siempre.