Perdón

Que te rompiera el corazón seria la mas surrealista de las imágenes. Un paisaje fantástico de los más macabros que nunca hubiese podido imaginar. Me lastima tanto que no nos entiendas como entiendo que esperar que me leas el corazón es imposible. Podrías dar simplemente una vista panorámica a los hechos: mientras vos te vas a mover vestida de murga, yo me quedo sin voz, sin sexo y sin perdón acá tirada con una estufa en la habitación.

He luchado por tus ojos todos los mundos que conocía. Intentando salir victoriosa nos desangramos hasta las uñas. Darte un último abrazo es mucho más difícil que plantar semillas de tomate en la Antártida o volver a dormir una vez en tu casa dándote la mano. Aunque podemos reconstruirnos sobre el hielo mil veces, aun así vamos a caminar con frío, no puedo soportar que te pase a vos.

Estamos acorraladas en un foso muy oscuro y la risa de él nos corroe los huesos y arranca cartílago a cartílago la esperanza de estar mejor. Te quiero tanto que puedo trasmutar en escudo o espada, y ayudarte lo más que pueda. A pesar de que no sea suficiente. Por otra parte, estamos rodeadas de fantasmas que desgranan a cada ser íntegro hasta convertirlo en un cadáver exquisitamente loco. Vos hacés que se escurra el miedo por la cañería y te enfrentás con el pecho descubierto para salir victoriosa. A pesar de que no sea suficiente.

Para seguir de pie necesitamos hacer algo que escape a la rutina. Vos desplegás las alas una vez más y yo te imité porque confío en vos. Ambas buscamos refugio y calor en alguna plataforma perdida. Tras varias horas de vuelo llegamos a lugares diferentes. Sería increíble si tuviese el control remoto para redirigirnos a la misma estación. Pero no existe ningún aparato que maneje el libre albedrío, tampoco tendría sentido.

Si seguimos de cara a lo que nos hace vulnerables vamos a hacer veneno todo lo que hacía chispas. Lo último que quiero desgastar es el amor. Sé con los párpados cortados que las palabras son cuchillos, pero las pinté como disfraces para gritarte amada Luna. Moriríamos mil veces si volvemos a empezar.

Esperaba que lo entendieras sin oscurecer el corazón. Hacerme cargo de decir nuestra verdad escondida detrás de cada beso es la tarea más difícil que he tenido que abordar. Evitar callarla ha sido quizás el más fuerte de los gestos de amor. Siempre te he sido totalmente sincera, sin importar las consecuencias. Siempre te he sido absolutamente fiel, sólo a vos. Y ojalá que entiendas alguna vez que ese puñal era un pañuelo ya gastado de tanto escucharme llorar.

Es imposible volcar el corazón cuando trasciende toda lógica que a pesar de las heridas tu mano sea el único puente que he llegado a conocer. Quiero que podamos seguir el flujo de nuestros caminos hasta que nos volvamos a juntar.

Te juro que si tuviera toda la abrumadora energía para dar vuelta el mundo y cambiar el futuro que nos esperaba con un cuchillo en la mano, lo haría. Como sea, me he desagotado y no puedo hacerlo otra vez más. Así funciona porque lo siento el mi y fuimos la misma persona divida en dos.

 

Interesante prosa, la he leído pero no lo suficiente como para comentar como merece, prometo regresar.
Abrazos y aplausos.

 

Confesiones hechas a media voz, para compartir con alguien íntimo, cercano. Narración que interesa desde el primer párrafo. Un saludo.