Perverso

Analizaré tus letras desde dentro.
Así funciona mi mente.
Me zambullo y buceo.
No navego.
No manejo timones.
No grito
¡Echen ancla!

Me dejo llevar por cada letra que siento.
Algunas llegan al motor principal y éste me activa mucho más.
Éso me ocurre al sentir tus perfectos y trabajados sonetos.
Llegan al punto exacto de mi centro.

Somos máquinas imperfectas.
Algunas no sabemos amar sin dinamitar todo a nuestro paso.
Me martiriza pensar que nunca conoceré ése amor pausado y calmado.

Estamos hechos para amarnos,pero....
¿De qué manera y modo?
¿Vale todo?

Dar sin recibir.
Sin esperar recompensas.
Así siento tus letras.


Estoy ejerciendo mi derecho a pernada.
Abro tus letras y me guardo en ellas.

......Y no hago sonetos porque no quiero.


Un beso

 

¿Estás destripando mis letras?
¿Me destilas?
Así que también puedo hacer endecasílabos casi perfectos.
Escondelo
Será nuestro privado jardín secreto.

Tengo pánico escénico.
Deja de empujarme.
No quiero.

Gracias Sergio siempre buen amigo.
Gracias por mover el centro de mi universo.
Gracias por volver y abrazar a Marianne.
Es maravilloso contar con dedos amigos.

¿Y ahora qué?
¿Nos hacemos unos sonetos?



Creo que voy a llorar.

Soy una dramática sentimental.
Gracias

 

Simplemente ya no dire más nada.

 

Soneto marca de la casa donde se moviliza la dialéctica del amo y el esclavo en materia sexual.

Buen trabajo.

Saludos

 

Un placer epasar por tus versos y disfrutar de un excelente soneto, abrazos.

 

Nuestras voces de hielo apagan fuegos y muchas veces apagan sueños.
Gracias por compartirlas
Me gustan leerlas.
Un saludo

 

Intensos versos, donde la pareja se ha convertido en rutina maquinaria y la agonía del alma se convierte en tristeza. Maravilloso soneto con imágenes que retratan fielmente tu sentir. Felicitaciones Sergio por tu fabulosa poesía, saludos Daniel

 

El paso del tiempo. Un deleite, Sergio.
Abrazo.

 

A veces en las negociaciones se produce un diálogo de sordos y no hay mayor sordo que el que no quiere oir ni mayor ciego que el que se niega a ver. Me encantó tu soneto amigo Sergio, besos llenos de admiración y cariño....muáácksss