Podrìa

Podría

Podría de angustia mal morir desolado
sin fe ni esperanza de silencio herido
sangrando lágrimas en un rincón olvidado
vuelto un despojo por tanto haber sufrido.
Déjame solo, de soledad habitado
distancia la sombra que con crueldad ha fingido
entierra mi nombre profundo y callado
que nunca se sepa donde he sido escondido.

No siempre serás el engaño invocado
algún día tendrás el andar penitente
la amargura del sauco haberla probado
y sentir en los huesos el desuelo doliente.
Vagarás con desprecio entre arenas y cardos
en desiertos lejanos por el Sol abrasados
sin albores ni ocasos se volverán fardos
las ilusiones que en mi alma habrías tú sembrado.

Permita la esperanza que el sufrir te haya cambiado
y en el tiempo sin tardanza en soledad arrepentida
aunque el río trae sus aguas aún su cause haya secado
dejado haya en tú alma la luz siempre encendida.
Presiento por los vientos los aromas de tristeza
cercana sollozando con lágrimas de fuego
con pasos serenados y su cuerpo de tibiezas
envuelta de verdades el perdòn será su ruego.

 

Gracias Mary, por tus bellas palabras, cariños.