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Poesi y pensamientos en una noche triste y melancolica

Tema en 'Prosa: Obra maestra' comenzado por franco pavez, 27 de Enero de 2008. Respuestas: 0 | Visitas: 1709

  1. franco pavez

    franco pavez Poeta recién llegado

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    27 de Enero de 2008
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    Aquella vieja historia de amor...


    Y allí sentado, sobre una vieja silla frente al escritorio solitario y la lámpara que iluminando su propio reflejo, podía leer aquella triste historia. No pude evitar dejar derramar una lagrima de mi garganta y ahogarme en la dulce y negra tinta que se bañaba en las hojas de un claro color desteñido, en donde se contaba aquella historia, no era mi historia, pero aun así sufría. Amaba tanto como aquel desafortunado protagonista y me desespere en mi propia agonía al no encontrar la pagina final la solución de este problema como la sufrida y bella dama enamorada. Ahora, con esta leyenda de los dos amantes, un guerrillero desventurado y una mujer que le amaba y estaba encarcelada, me hizo romper en lagrimas. Quería poder viajar a través de ese mar inmenso de letras y poder susurrarle al oído donde se encontraba lo que buscaba con tantas ansias ;con un fusil darle en el pecho a sus enemigos, que en aquel momento, se convertían en los míos.

    Ahora, pasado ya mas de cuatro horas reflexionando de lo sucedido comienzo a perderme en mis pensamientos, dejándome caer entre sabanas blancas y acariciadoras, como si fuesen un beso, mas aun, sostengo aquel libro de mil historia. Mientras escucho en mi cabeza aquella hermosa tonada, puedo ver volar sobre mis ojos mariposas transparentes, que al enfrentarse al sol se tornaban de un colorido arco iris, dándome nostalgia, bañándome en melancolía, sintiendo los labios húmedos de a quien el libro me recordaba. A ti, mi bella dama. cierto es, te he dejado sola entre tanta sombra mientras yo me perdía en este mundo, pero aun así te deseo. Aquel libro me recordaban mis propias vivencias y me hacían verte, lejana, tersa como el algodón y perdiéndote de mis manos, o es talvez el delirio el que me hizo llorar al no tenerte, de desearte, de querer besarte y sentir por fin apagar esta llama en mi pecho que me consume, esta es mi historia, soy un trovador del deseo, que lee ahora su propia obra.


    El trovador de la vieja guitarra

    Talvez mi vida incoherente y sin sentido le de a los que me han conocido algún sentimiento, o por mayoría de mis desventuras, resentimientos. Mas aun después de tantas experiencias vividas, de las manos haberme quebrado y mi hueso crujido, sigo de pie en esta tierra seca y árida que reseca la misma fresca sombra que refresca aquellos abrumadores paramos.
    Algunos se preguntan si estoy loco o no, no lo se, talvez si o talvez no, da igual. Muchos me odian y algunos me aman , no, aman no, querer talvez, ¿quien sabrá?, solo dios, lo que es seguro si, es que yo amo, si, mucho amo a aquella mujer que no siente nada por mi, ¿o si?, ¿quien sabrá?, solo dios. Solo puedo seguir caminando por las carreteras de la vida, mientras veo pasar a mi paso los autos que abordan a los desconocidos, muy probablemente gente que nunca mas veré, no se, no me interesa, quiero vivir tranquilo.
    Y me encuentro solo alquinal, ¿a quien le importa?, no se, solo se que ella ama a otro y eso me hiere mucho, y yo solo sufro con mi morena de curvas finas y brazo firme en sus tonadas, mi negra, mi vieja guitarra. Ahora solo y desconsolado toco una nueva canción, nunca creada por hombre, pero preescrita por el destino, llevada a mis manos y aclamadas por las dos cálidas lagrimas que rodan ágilmente por mi ruborizada mejilla.
    Me recuerda aquella noche, yo sentado a su lado, en sus piernas acomodado y acariciando su mano, mas aun ella no me quiere, que pobre que soy, talvez, ¿quien sabe?, solo ella y dios. Pero sentí el calor de sus rojos labios besándome, era a la vez una maravilla, a la vez una tortura, porque ella no me ama, solo besa a mi, su pobre y vago enamoradizo que le pide aquel suplicio, y que se lo regala talvez por despecho o talvez por que en el fondo me ama, talvez sea eso, pero por sobre todo, que mi corazón y alma le pertenecen a sus deceos.



    espero que les guste
     
    #1

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