Quería anunciarlo

Nada, solo eso.
Hoy tengo al silencio
metido en el ombligo
se me ha hecho carne,
copula conmigo.

Me llena de caricias,
me duermo en su regazo,
me muestra amaneceres
cuando andamos descalzos.

Nada, solo eso.
Quería anunciarlo.

 

Vevero.
Unos bellos versos
a ese silencio que suele habitarnos
ciertos días....
Estrellas a tu pluma.
Un abrazo.
Ana

 

Gracias Ana, a veces el silencio es un abismo insondable, besos

 

Bien, anunciado. Me suena que ese silencio aunque lo pintes lindo no es muy bueno.
besos Vero

 

Coincido acá arriba con Doña Marcela, suena pero no se ve lindo ese silencio.
Y yo que algo (sin h) sé, no puedo dejar de entristecer con vos, aunque no esté a tu lado.

Vesos

 

Hola interesante forma de anunciar lo que se siente. Saludos y estrellas
¡SONRIE

 

Bueno Vevero... ese silencio parece ser bien reconfortante... disfrútalo!!

Te abrazo!

 

Pocos son los silencios buenos, Marce, este a veces es demasiado buen compañero.
besos

 

jjja eso sin H. Gracias Mau, besos y vesos

 

A veces el silencio se hace carne y comparte de buen grado con uno mismo,
otras ya no es tan buen consejero
Tus versos si son buenos, Vero.
Un abrazo desde la otra orilla

 

Un silencio anunciado, como el susurro del alma melancólica, bellisimos versos poeta, un abrazo y estrellas!

 

El ombligo, el centro genético de tu ser, allí donde las coordenadas se distribuyen al resto de tu piel. Allí el frío. Solo eso.
Exquisito anuncio de buena poesía.

Un abrazo.

 

Nada ¿eh? Las musas abúlicas pasan de largo, en la garganta crece el silencio como un bocio... Y aún puedes levantar un magnífico poema sobre esa yerma materia. Eres grande y misteriosa, buena amiga.
Un abrazo.

 

ja gracias Bonita, se hace lo que se puede, a veces.
besos y gracias por pasar