Reminiscente

Paralizando esta desnaturalización menguada, espero la llovizna mientras pienso en esas pequeñas grandes cosas, que mutaron de sentido y de sensibilidad.
Las mejores y más inocentes imágenes de mi adolescencia.

A este paso ya muere la cara del viento.

Son cuatro menos veinte, y vuelvo a escaparme.
Estoy cansado de hacer maquetas, siempre no, pero a veces cansa hacerlo.
Lava cae sobre mi cerebro, no sé que quiero hacer, solo quiero hacerlo.
La descuartizada en el bar avenida.
Capitán del pacifico.
Dicen que camina, por entre las ramas, que es algo egoísta y singular
Transparencia.
Miré en mi cuarto, pensando encontrar, prendí la radio, pensando algo escuchar.
Mirá la gente, a tu alrededor, creen comprenderte y no paran de hablar.
Vos querés optar por otros rumbos, elegir y fabricar tu mundo.
Y las bandas por las calles…
Parece que hoy no tocamos.
Nuestro tubo de cada día, nos divierte nos da alegría.
Servile un café, andá comprarle cigarrillos.
El tiene la plata, el tiene el poder.
Tarde de calor y las chicas tomando sol, febo reluciente en el verde de aquella plaza.
Aguante los cadetes.
Sábado a la tarde los pibes van cayendo, conseguimos un balón y empezamos a patear.
Tarde de verano, tomate un valium y anda para la pieza.
Ser o no ser, desde un hilo grita la ilusión.
Podría seguir toda la noche, pero tengo sueño.