Rómulo y Remo, en una misma barca.

A veces, la gente me pregunta:
¿ Cómo te sientes, pequeñuelo ?
Y yo les ofrezco un pañuelo.
Para que se suenen los mocos.


Así, poco a poco, voy haciendo amigos.


En la ciudad, el estilo sigue vivo.
Conozco a doña Jimena,
a doña Críspula del Flequillo,
o a la marquesa de Calahorra.





Suelo obsequiarle con una gorra.


Nos merecemos un barrio modernizado.
Un barrio para todos los peregrinos.
Todos los pájaros azules, corre-caminos.
Y algún que otro coyote.


Los dibujos animados nos educaron.


Speedy Gonzales está enamorado
de Guadalupe.
Hay cosas que nunca cambian, en Arizona.
Modestamente, somos objetos,


y no personas. Es por ello que remamos


contra-corriente.

 

Siempre interesantes y divertidos tus poemas, amigo Nommo. Saludos, felices días.

 

Gracias, Tribu Zen.
Lo que otros muchos consideran nauseabundo, tú te atreves a probarlo.
¡ Me alegro ! Soy un cocinero harto extravagante.