Semenarios

Flores insemenes
de semenarios
desangrados

crisálida triste
creciendo en barro
de manos urgedientes

poca luz
floral y musa
cuna oscura

derramé mi canto
preñé tu claustro
nació mi llanto

sordo mudo
cíclope visco
acabado

bastado intrópido
de luníacas rimas
poeta malinacido

es mi yo yoíto
semen aguado
escribidor yosante

alunadado
cansaído
liberatado
surrealizado
tristemisado

mi yo ya yolito
inacido mal
no haya final

 

Mejor que no lo halle
mejor que no lo encuentre
que el intercambio semente
toda clase de suerte.
Medusas las miradas,
misterios de la muerte,
encuentro de los seres
que besan las frentes.
Despliego ya mis alas,
preñando tus silencios,
me cuesta desprenderme...
de mis labios cae un beso

 

Llueven las horas
gotas de silencio
muertes infinitas
casas vacías
lunas cansadas.
Duele la distancia
las plantas se secan
pero la noche late
se agita, respira,
y ese beso
que cae de tu boca
es el que ahora me mira
y se acomoda entre mis cosas
y ya está.

 

Ya saben a luna mis horas
a labios mis lunares
y a niebla la mirada.
Las estrellas aùn me acompañan...

Envidia de tus ojos
que miran estelares el crepúsculo del brillo.
Infinitas gracias.

 

Palabras que brillan
y aclaran los cielos.
Besos que encienden
miradas incendiarias.
Sueño que pasas y te quedas
como el final de una estela
cansada de vagar sin rumbo.
Complices poemas
acá estamos, ahora,
por ellos, llenos de ellos.
Qué lindo es el día
luego de acariciar tu noche,
verdadero poema
entre el sueño y la realidad.
Gracias.

 

las gracias se duplican,
los sueños no se esconden.
adormece la espera
y los labios -que un día-
pasearán por las manos
aniquilando rutinas.
Los silencios resguardan
las máscaras de la vida...
será -pregunto-
yo sé que sí.

 

Será cuando
se callen los silencios
y se duerman los miedos,
de otra manera
será imposible.