Siempre en la nada.

Con el corazón en la mano...
Sientes como las paredes se derrumban.
¿Dónde...? ¿Dónde...? Te preguntas.

¿Dónde quedaron las emociones?
Las alegrías y las penas de un sinfín de acciones.
No en ti. En ti sólo quedó la nada.

En ti sólo quedó la nada. La nada.

El amante. ¡Cúlpalo a él!
¡Él te ha abierto los ojos!
Él ha exprimido el recuerdo de que...después...
sólo queda el vacío.

Y el perfume en la piel. Sólo eso.


Desgarras la mente con los recuerdos,
las memorias. Y sientes el torbellino
de la agria decepción. Puedes palpar la alegría,
saborear la miel de una fantasía.


¡Pero incluso eso! El todo se convierte en nada.


Nada. Nada. Nada.
El tiempo … se acumula en la mirada.
En las mejillas y en las acciones.
Te sientes tan pesada. Pero es él quien te lo quita todo.


Y no deja nada.


Nada para nadie. ¿El vestido? ¿El perfume?
Hasta el dinero que te cae del cielo se desprecia
a sí mismo. Y de nuevo no sientes nada.


Nada es el todo. Y todo es nada.
¿Es por eso que rebuscas en los escombros?
En la mierda y el pecado...
Y te pierdes. Te conviertes en la cortesana del diablo.


Y todo para nada.

 

Fuertes y contundentes palabras has logrado plasmar
tu pensamiento es lógico,
algunas veces he pensado de esta manera,
un placer haberte leido
saludos

Edu♥

 

Muchas gracias, Edu.
Nosotros venimos de la nada y el vacío... Supongo que ellos forman parte de nosotros eternamente. =)

 

Qué bajada niña, con pensasr que no te queda ese "nada".Suelen deir que hay que sacarle partido a la vida, !eso suelen decir!
PERO AVECES suelo pensasr como tu-Un abrazo

 

Es difícil saber el valor de la vida.. y más saberla saborear y sacarle partido si no se tiene punto de comparación con el sinsabor de la 'nada'. Así suele ser.
=)