Sobre lo peligroso de aburrirse

Cada vez estoy más convencida que el aburrimiento no es nada inofensivo. El aburrimiento es letal, es una enfermedad crónica. Porque cuando más aburrido uno esta, más busca uno embromarse, no importa los muchos motivos reales que tenga para encantarse con la vida.
Y cuando uno se aburre recuerda el pasado, recuerda y se amarga por cosas que ya no valen la pena. La amargura es por tanto, una forma de aburrimiento. Por ejemplo recuerdo cómo termino nuestra historia y me amargo. Pero el problema para el aburrido es no haber terminado mal sino en todo caso triunfar. Triunfé demasiado rápido y el aburrimiento es el lado B del triunfo fácil. Por eso a estas horas de la noche recuerdo su nombre o su voz y la fuerza de ese recuerdo me desploma en la cama.
No lo sé. solo quiero un lugar donde tirar mis sentimientos.

 

Me ha gustado leerte. Tu tema de reflexión tiene sentimiento y me ha dejado pensando en cómo me siento cuando mis hijos me dicen que están aburridos, que no hay nada que ver en la televisión o que no tienen nada que hacer. Es curioso pero yo siempre tengo algo que a hacer. Escribir es la mejor terapia para sentirse mejor. Un abrazo.

 

El aburrimiento viene de la incapacidad cerebral para generar movimientos articulados de un cuerpo al que mal gobierna y de un corazón muy obstinado. Saludos cordiales, Andrea.

 

INTERESANTE,

 

Interesante tema para reflexionar. Saludos cordiales.