Sol indulgente.

Nuevamente me saca de un agradable letargo la luminosidad de un sol indulgente para acostarme después con un remordimiento agraviado por la noche andina…
La incertidumbre en Chile vino con el terremoto, y los corazones continúan curtiéndose con escarcha y lagrimas de aceite,… en el horizonte se evapora la agonía roja de un crepúsculo austral que el ojo herido por vez primera reconoce, mientras un cóndor con don budista disfruta la cruel estación,…
El dolor se ha perdido en el este embobado por la sombra de la noche, y el día me ha embriagado con el mismo bálsamo al que estoy cebado,… la brisa salvaje emboca la claridad mientras mi corazón sigue anhelando su ejemplo y los matices tenues,…

 

Es un verdadero placer pasar por aquí. Saludos argentinos...

 

me gusta, y mucho.

 

Me gustó mucho leer tu prosa, sentida y con mucha
melancolia.Un abrazo .Zulcas.

 

muchas gracias..

 

Interesante. Suena moderno, pero con una conexion a lo natural. Con un toque de melancolia.
Interesante lectura.

saludos.