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Suicidio

Tema en 'Prosa: Filosóficos, existencialistas y/o vitales' comenzado por Aisha Baranowska, 28 de Septiembre de 2012. Respuestas: 1 | Visitas: 794

  1. Aisha Baranowska

    Aisha Baranowska Poeta que considera el portal su segunda casa

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    SUICIDIO


    La vida es mala, pero hay que vivirla hasta que se termine por si misma - pues, no tenemos derecho de elegir, si continuar viviendo o acabar consigo mismo cuando la existencia nos agobia, cuando no sabemos vivir... Es así porque si tuvieramos esa elección, al no querer vivir más - eso no sería justo con los demás que sí quieren vivir... Ellos no tienen esa elección; cuando viene la hora de partir, no se puede hacer nada para evitarlo - y seguramente, si tuviera alguna elección, la mayoría de la gente escogería la vida... Pero no es así. Los enfermos de gravedad, los discapacidados, las víctimas de accidentes, asaltos, o víctimas de la guerra, por ejemplo - si alguien a quien no le gusta vivir o alguien desesperado sin vistas para mejorar su condición existencial, quisiera matarse, entonces, sería justo que los demás que prefieren seguir con vida, también pudiesen escoger a la hora de morir... Pero no pueden. Por eso, no es justo con la humanidad, que uno tenga la elección de seguir adelante o suicidarse cuando ya no pueda resistir... Por más que uno sufra en este mundo - yo sé que es muy fácil decir sin conocer, sin vivir en carne propia las experiencias ajenas - por más que uno deteste la vida, sin embargo, tiene que vivirla hasta el final. Y claro, no todos son bastante fuertes, no todos son capaces de enfrentar el sufrimiento - pero aún así, hay que intentarlo por lo menos y no rendirse nunca... Hay que apoyarse en la esperanza la cual resulta del hecho de que nunca sabemos, qué es lo que nos espera en el camino... Para algunas personas, todavía hay esperanza. Para otras personas, puede parecer que no la hay - por ejemplo, cuando no existe cura para su enfermedad o cuando no hay posibilidad de que volvieran a funcionar normalmente por causa de una discapacidad muy séria... Sin embargo, si esa gente se de cuenta de ciertas cosas, puede ser que haya por al menos alguna esperanza, aunque sea muy poca. O si no, igual, hay que vivir de alguna manera... Porque no es justo con los que no tienen elección cuando se trata de ser o no ser...

    Aquel sentido de justicia tan peculiar no es lo único que me hace pensar de esta forma sobre el asunto; pues como creyente, me parece una forma de blasfemia usurpar el único derecho de Quien nos creó, al quitarnos la vida propia. Pero si uno no es creyente, pues que piense en la justicia de la que hablé hace un momento; todos tenemos problemas, más o menos graves, pero por más graves que sean - ni siquiera vale la pena el suicidio, si de todos modos algún día dejaremos de existir - ¿para qué, entonces, precipitarlo? No tiene sentido... Además, si la gente que quiere vivir, no tiene elección cuando hay que morir, tiene que dejar este mundo, quiera o no quiera - entonces, los que sufren, tampóco deberían de tener oportunidad de escoger; tienen que vivir y sufrir, así como los demás, ellos incluso, tienen que partir cuando llegue su tiempo, para que haya justicia...

    Mi propia situación muchas veces es de veras dramática, sin colorizar - sin embargo, no me rindo y no me detengo en medio del camino, a pesar de que hay en mi vida momentos muy oscuros; pues, veo la realidad tal como es - y percibo que hay más mal que bien en esta realidad, pero ese no es motivo para suicidarse, aunque no nos guste la vida, aunque no sepamos vivirla...

    El gótico, como una cultura de grandes pensadores y filósofos, es conocido por su glorificación de la muerte, quizás por su aspecto misterioso, la cual es vista por los góticos como liberación y por lo tanto, no le tienen tanto miedo - por lo menos, no tratan de evitar ese tema tan difícil de discutir... Pero la manera peculiar de percibir la no-existencia no significa que uno quiera matarse. Al contrario, seguramente escogería la vida, si es que tuviera alguna elección... Sin embargo, por un lado, le gusta la vida, a pesar de su tragismo, y por el otro, le agobia... Es que la existencia tal como es, despierta unos sentimientos opuestos en el corazón sensible de un ser gótico. Por lo mismo, los góticos reflexionan sobre todo; también sobre aquello que la mayoría de la gente prefiere simplemente ignorar... Pero, aunque pensar a veces duele, como todo en este mundo tiene su precio, después de todo, ¿para qué entonces tenemos el cerebro, sino para usarlo de vez en cuando? Como también tenemos el corazón para sentir, hay que hacer buen uso de los dos: del intelecto y del corazón, y no dejar que uno esté por encima del otro...



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    [28-09-2012]
     
    #1
  2. Melquiades San Juan

    Melquiades San Juan Poeta veterano en MP

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    Querida Ashia, cómo estás. Heme aquí de nuevo en tus textos que me resultan del todo interesantes y de los cuales me extraña tanto que pasen desapercibidos para el resto de la comunidad y no sean comentados. Yo asumo que la falta de respuestas se debe más a la inseguridad que se puede sentir al abordar un tema sobre el cual las personas tienen tantas perspectivas, unas intelectuales y otras automáticas propiciadas por la influencia y mandato de las doctrinas religiosas. Como te dije, a mí me despierta curiosidad este tema del suicidio. Abordarlo desde otra perspectiva, la humana no religiosa, la de una valoración de la vida a partir de otras concepciones.

    La vida es cruel... para muchos lo es. Unas veces se percibe cruel por cuestiones emocionales, otras por físicas y otras tantas por asuntos sociales. Estas últimas están en boga, una serie de suicidios en España y Grecia nos dejan ver que las cuestiones sociales influyen bastante en la determinación de las personas para salir del escenario donde el juego o el papel que les toca jugar no les gusta o es denigrante.

    Muchísima gente se suicida por cuestiones emocionales, aquí incluimos las afectivas. Y otras porque su aspecto físico se ha deteriorado o no le satisface. Siente repulsión consigo mismo.

    En todas las circunstancias la humanidad ha buscado aportar soluciones: transformaciones sociales, cirugías, medicamentos.. etc.

    En cuanto a si tiene o no derecho a decidir si se quita o no la vida, yo creo que sí es un derecho del individuo tomar esa decisión y a nosotros nos corresponde respetar esa decisión, asumir las consecuencias afectivas que nos resultan de esa ausencia amada pensando que para el suicida pudo parecerle la única opción.

    Tenemos todo un paquete de reflexiones, doctrinas, filosofías que desalientan estas intenciones, que las reprueban y condenan; que intentan fundamentar la vida como algo con un valor inapreciable.
    Para una persona en crisis existencial todos estos recursos pueden resultarle inútiles porque solo prolongan su agonía.

    Muchas personas no se suicidan por miedo, miedo al dolor del acto suicida, al proceso destructivo del cuerpo que contiene su consciencia de ser vivo; otras por lo que le han dicho que está más allá, un más allá que se suma a las ya de suyo dolorosas circunstancias que le motivan a desprenderse de este lugar en donde solo ha encontrado sufrimiento y desdicha. Los infiernos y cosas así.
    Hay muchas doctrinas que intentan hacer creer al hombre que todo dolor es una prueba, una especie de curso para hacer de él un sobreviviente odiseico de un mundo planeado así para darle la gloria por haber resistido y superado la prueba. Yo pienso que más que existir un proyecto así, tales teorías han surgido intentando una respuesta a tanto padecer que ha afectado a los hombres, o para explicar por qué está presente, como una constante la agonía de la vida, ciertamente (lo es hasta hoy) fuera del control de los seres humanos.

    Si vemos a la vida fuera de los contextos religiosos y de esos que buscan mostrarla como una especie de prueba o grado de evolución para ganarse "alas" o "planos de luz", nos encontramos con lo que a simple vista es: un sitio en donde la sobrevivencia de cada una de las especies que forman eso que llamamos vida libra todos lo días lidiando, alimentándose contra las demás, o dentro de la propia. Fuertes dominando a los débiles. Los más adaptados a los mecanismos de la sobrevivencia, que la naturaleza establece como la base de la subsistencia, usándola contra los otros.

    Entre los hombres la inteligencia confronta al instinto animal, se rebela en contra de esos mecanismos depredadores e intenta crear para todos una vida digna, se vale de los recursos intelectuales para denigrar la naturaleza depredadora y ponderar la "humana" la del valor del ser vivo ya sea por ser un ser humano o por ser una criatura divina. Qué bueno que en los últimos tiempos la humanidad ha abierto su espectro de consideración como seres objeto de una vida diga a las especies animales. ¿Veremos un día una valoración similar para los microorganismos?...

    Por mucho que el hombre avance en el respeto de toda vida, siempre estará sujeto al proceso que la naturaleza ha establecido para sobrevivir: comer para no morir de hambre.

    La mente humana, eso que nos ha traído hasta este estadio de pensamiento, ha comprendido casi en su totalidad el horror que significa devorar a otro ser para procurarse con su muerte la prolongación de su propia existencia. Los budistas llevan siglos entendiendo esto. Los cristianos lo ven como una piadosa decisión divina, nos ha puesto para las barriguitas todo una fauna para vivir degustando al horno o al carbón el combustible necesario para seguir hasta el último día.

    Por muchas razones, alguna gente no quiere ser parte de esto.
    Yo no soy vegetariano, tampoco veo el proceso de la vida que consume a otro ser para beneficiarse con su muerte y seguir vivo como una licencia divina. Pienso que ese proceso es de alguna forma insalvable por más que lo haya comprendido lo horroroso que es por sí mismo. Es la vida, son sus mecanismos que se cumplen irremediablemente, y uno no decide si es parte de él o no, como sucede también en muchos casos con cualquier motivación que un ser humano pudiera hallar de bueno o padecer, para ser parte de este mecanismo. Yo creo que si una persona, por cualquier motivo, considera que no hay solución a la situación que lo lleva a no querer seguir con vida y le parece terrible cada minuto con ella, tiene el derecho de tomar una solución que le libere, y si alguien se ofende pues tendrá dos trabajos: incomodarse y acomodarse.

    Abracitos Ashia. Espero otro.
     
    #2
    Última modificación: 23 de Noviembre de 2012

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