Sutilmente...

Hay dilemas que rondan en mi mente
algunos me provocan un suspiro,
otros matan mis sueños sutilmente
dejando el corazón latiendo herido.

Intento no soñar, es complicado,
un defecto quizás irreparable.
Soy soñador y nunca lo he negado,
aunque serlo me vuelva miserable.

La soledad se siente en cada poro,
el silencio lastima los recuerdos,
el tiempo vale más que todo el oro
y solo me cobijan desacuerdos.

Algún día será mejor la vida,
podré mirar el cielo sin tristeza,
será menos oscura la salida
y podré decidir con mi cabeza.