Tan solo vete

Vete, no mires atrás y solo vete,
sin detenerte, avanza por donde quieras,
menos hacia mi... tan solo vete.

Vete sin gemir, sin parpadear,
no quieras congelar ni un segundo
o llevarte algún recuerdo... No lo vales.


Vete sin nada, sin dejar rastro, ni huellas
, no dejes pistas, ni senderos,
vete sin dejar señuelos... que nadie va a seguir.


Vete ligera, sin la forma de pensar
tan indeseable con la que cargas,
no eres bestia de carga... y ¡qué carga!


Yo no diré ni haré nada, quedará el silencio,
no lo hagas por mí, ni por ti, ni por él.
Pero hazlo ya, ¡Por Dios!... y solo vete.​

 

Puedo resumir tu poema en una palabra: ADIOS, un adios que duele; pero que es necesario. Con una dignidad enaltecida, me gusto mucho.

"

avanza por donde quieras,​

menos hacia mi..."​

Excelente.

Siempre: ISABEL

 

Mi Sra. Isabel, muy gentil... Ciertamente el adiós duele, pero mas duele la traición.
Sobre este tema escondido gira este poema. Gracias por participar.