Tarde

TARDE

Tarde,
siempre es tarde,
demasiado tarde.​

Como arena entre los dedos,
un suspiro,
un pestañeo.​

Un tren que no alcanzo,
una carrera contra el tiempo
perdida de antemano.​

Tempus fugit,
Carpe diem,
Tarde, siempre tarde,
se escapa la vida.​

 

Se escapa la vida, y vuelve a China.
Se escapa la vida, y vuelve a Alemania.
Se escapa la vida, y vuelve a Rusia.
Se escapa la vida...


Y se hace budista.
Evolucionista, como Charles Darwin.
Fría y calculadora, como la Luna llena.


Se escapa la vida, y recibe un mordisco.
Se escapa la vida, y acaba menguando.
Se escapa la vida, la noche del eclipse.
En el laberinto, la única salida es la vida.


¡ La vida ! Tendremos que entregar la bolsa, al ladrón que nos asalta.

 

Me gusta tu locura Nommo. Viva la vida loca. Un saludo.

 

Eso es: Para vidas cuerdas, ya tengo las guitas de mi guitarra.
O los cordones de mis zapatos.
El cinturón de cuero, con su hebilla...
El paraguas de Mary Poppins.


Pero a la hora de la verdad, necesitamos confrontar con nosotros mismos.


¿ Cómo lo haremos ? En el escenario. En el teatro.
Y si no, dando un concierto de piano, o de violín.
O de clarinete.
Dar es algo, muy importante. Así, no se te hará tarde.


El tren que no alcanzas, es el mendigo a quien no diste una limosna.

 

Un instante puede que sea tarde, pero no la vida, saludos poeta un gusto pasear por tus letras.

 

Gracias por tu comentario Pincoya76. Ciertamente hay instantes que son eternos. Un saludo.