Taxidermia Emocional

"Ya es demasiado tarde para revertir el proceso pero se quedara para siempre en el buró"....

La luz de aquella vela sobre el tocador iluminaba la habitación,
yacía medianoche y aumentaba mi angustia,
dosis exactas de morfina amedrentaban mi dolor,
y mientras tanto perdía la conciencia con sobre dosis de alucinación....

Era mas fácil ver el sol de noche que me encontrara la cordura,
buscaba aquello que me hacia falta,
mas no movía un dedo para encontrarla.

Podía ser que ya lo hubiesen robado,
a lo mejor lo pude haber perdido
o simplemente jamas lo había poseído;
en todo caso todo yacía en manos del destino,

Sabia que no era conciencia de lo que carecía,
era simplemente la chispa adecuada,
para quemar los restos de lo que fui,
envolver entre llamas los prejuicios y las estupideces de aquellos años,
y desaparecer todo rastro de lo que nos hizo tanto daño.

"Habrá algo que jamas se consumirá"~ susurro el ángel de la soledad;
y trate de ignorarle,
mas la curiosidad y la ansiedad de consumía mientras trataba de encontrar la solución,
la caja de Pandora de mi interior, expresaba que me consumiria al no saber dicha respuesta,
"eso que tanto que buscas se llama corazón"...

Corazón, ahí donde yacen los sentimientos;
que muchos catalogan como buenos o malos,
lo que nos hace tan frágiles e inservibles,
lo que nos vuelve humanos demasiado humanos,
lo que nos corrompe y nos hace revivir...
Deseo extraerlos ciegamente pero conservarlos a la vista de mi silencio,
es algo te extraño pero tan sincero,
pareciera que se buscase conservar solo el empaque y no el relleno....

Asegure una cita con el ángel para que me sacara lo que destruía por dentro,
y así fue como inicio la extracción de cada uno de aquellos sentimientos,
todo aquello parecía sonar ilógico,
pero el ángel asintió a mi pedido y dio rienda suelta a la operación...

Desde ese momento carezco de todo aquello,
soy solo una marioneta intelectual,
carente de afecto, que busca un sentido sin saber en donde...
Que pretende vivir mientras se esta muriendo,
solamente guarda en el rincón, el frasco donde yacen todos sus sentimientos.