Tomó mi mano y juró venganza IV

Después de preparar equipo y uniforme, revisar y nuevamente revisar las instrucciones de despliegue de elementos nos permitimos unos minutos de descanso antes del intercambio incómodo de recomendaciones.

En la arenga previa a oficiales y suboficiales nos exhortaron con apremio a no dejarnos llevar por la ira. A mantener una férrea disciplina y evitar a como diera lugar las emboscadas.
La instrucción sobre situaciones señuelo así como los falsos informantes era cosa cotidiana. El nuevo equipo de localización satelital nos daba una ventaja mínima... ya que nuestro adversario contaba con estrategias mucho más elaboradas y efectivas. Con equipo altamente sofisticado, que nosotros a ras del suelo no contábamos.
Sabíamos que por comodidad las casas de seguridad son establecidas en zonas habitadas y a la vista de todos. Por lo que pondríamos atención en ello.
El plan DN3 estaba en marcha y el primer contingente llegaría a la zona en menos de treinta minutos, así que nosotros deberíamos de estar ahí antes que ellos.
El descenso se haría por medio de helicópteros en zona alta y en zona caliente. Los dos contingentes nos encontraríamos al centro después de visualizar la zona en un arco amplio.
La población civil afectada ascendía a diez mil familias. Así que el frente a cubrir abarcaría varias hectáreas.
Después de un apretón de manos me despedí de JF y con mi compañía abordé el helicóptero AZ Bell212, aparato nada seguro para recibir fuego enemigo. Pues tiene la desventaja de una maniobrabilidad limitada a la vez que anuncia su llegada con mucha antelación debido a su ruidoso rotor.
Respiré hondo y me pregunté cuantos de nosotros veríamos un nuevo día en que pudiésemos estar preocupados únicamente por el próximo cumpleaños de nuestros hijos.

©®Todos los derechos reservados bajo el nombre de Jorge de Córdoba, Barak ben Asís, Cesarfco.cd​

 

Gracias Ligia por pasearte entre estas líneas.

Un abrazo.

 

¡¡¡¡Más...!!! muy interesante pero sigue
un beso

 

Gracias Rosario por leerlo y comentarlo.

Un abrazote.