tren siniestrado

La tierra tiembla bajo
el acero muerto
y en su interior
las almas se despiden
de su destrozado
y joven cuerpo.

Lo inenarrable sucede
en un segundo,
vine aquí desde lejos,
ahora no soy
del mundo.

Grita el niño, el anciano,
el padre, el hermano.
La sangre se hizo rio,
y el rio un pantano.
Lleven mi cuerpo sin alma,
¡regrésenme a mi tierra!
Que no soy polvo de aquí,
américa me espera.


En memoria a las víctimas del accidente de tren en España, donde murieron norte y sur americanos, y a todo el resto de humanos que perecieron ahí.

 

Triste poema estimado compañero a un lamentable hecho tan doloroso. Consuelo a sus familias y paz para los que descansan ya. Gracias por plasmar el dolor de manera tan hermosa como lo es este gesto solidario. Un gran gusto leerte siempre. Un abrazo y feliz tarde!

 

Tristes lineas que reflejan un dolor que rebasa fronteras. Una manera de honrar la memoria de las víctimas y unirse al deseo de que los deudos encuentren la resignación.
Saludos

 

Bellas letras soberbias, excelente trabajo.

 

Un conmovedor y triste poema nos compartes.
Lo ocurrido es muy triste y lamentable. Sufre
mi corazón por las víctimas del accidente y por
sus familiares. Bendiciones para todos.

 

Postumo a la reconquista de un nuevo instante.. como así va la vida. viene la muerte. Saludos.