Un año nuevo

En este año que comienza, no viviré de teatro , ni siquiera para no ir en contra de las mentes satisfechas.
El teatro es solo un escenario, un conjunto de luces, de atrezos, de paredes falsas, de cortinas que son los laberintos por los que los actores llegan sin ser vistos hasta la trasera, donde esta la verdadera vida, donde acaba la interpretación, donde acaba la función. Y ellos se desvisten de un guion impuesto.
A veces, decimos, escribimos cosas que parecen cargada de pesimismo o tristeza, mas nada tiene que ver con eso. Es real, decir que detrás del escenario, todo es distinto. Y no por eso eres una persona triste, solo alguien que ve de verdad como es el paisaje. Que puede deleitarse con la función y aplaudir, pero no por eso creer que es la vida real.
En estos días en que hay tantos adornos, tanto atrezo para alegrar y llenar de optimismo las vidas, corremos el riesgo de crearnos nuestro propio escenario, y dejarlo permanentemente, sin dar la vuelta para asearnos, quitarnos el maquillaje y cambiarnos de ropa y volver al mundo real.
Esto no supone vivir sin Fe, por supuesto, todos tenemos la necesidad de tener fe en algo o alguien, pero la fe, no tiene porque ser ciega. Puede tener cuerpo, puede ser contundente en argumentos.
Tampoco es vivir sin Esperanza, al contrario, es sumamente necesaria, pues es el hidrato de carbono del alma, sin ella no tendríamos vitalidad.
Tampoco, ser realistas nos resta Libertad , al contrario, nos libera de temores absurdos y creados por otros que sin nos apresan, y lo peor es que no nos damos cuenta.
Tampoco debemos vivir sin Ilusión, ella es como el combustible para poder asegurar la llegada a la meta. NI la montaña mas alta la destruye, pues si no es a pie, la ilusión la conquista volando.
Otra cosa que la realidad no debe quitarnos, es la Paz con nosotros mismos. Esta es la bandera blanca que hace a los demás corazones acercarse a ti, aunque veas la vida de distinto color.
Y otra cosa, en la que me propongo esmerarme es en la Entrega a la vida. A vivir mi guion, pero sin adornos, sin paliativos, no quiero sedantes, no quiero dormirme para no ver la realidad. Quiero vivir la vida, la vida real, aunque esta no sea un cuento de hadas sino un cuento chino.
Que la función de vuestro año, se quede anclada en un hermoso escenario, pero un escenario real.
¡Buen año, amigos!
SHA.