1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Un cuentecillo escrito por un diablo para enamorar a un hada.

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por Anskart, 25 de Junio de 2009. Respuestas: 0 | Visitas: 1390

  1. Anskart

    Anskart Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    24 de Marzo de 2009
    Mensajes:
    89
    Me gusta recibidos:
    28
    En el principio de los tiempos, antes de que el mundo fuera tal como nos lo a enseñado la historia y como lo conocemos ahora, los diablos vagaban por el mundo de travesura en travesura, porque eso si, aun no eran malos ya que el mal no había dado tiempo a inventarlo.

    Un hermoso día de primavera paseaba aburrido un diablo llamado Malaquías. El pasatiempo favorito de Malaquías era cambiar su alma por cosas terrenales ya que gracias a su planta de galán, simpatía y poder de seducción siempre acababa haciendo que se le devolviesen, recuperando así su alma y gozando de lo que fuera que se le antojara. Ese día de primavera andaba Malaquias por el vergel más exuberante y fecundo, que había visto en toda su larga y errática vida. Iba preguntándose quien seria el jardinero o jardinera que lo tenía tan bien cuidado, cuando de repente se topo de frente con la criatura mas hermosa que hubiera podido imaginar. Era Alseide un hada conocida en el lugar tanto por sus grandes virtudes como por su incomparable belleza. Viendo la Malaquías creyó marearse al notar las sensaciones que recorrían su cuerpo, pero pronto recupero la compostura y quiso jugar con el hada a su juego favorito. Ni corto ni perezoso puso su mejor cara de actor y con voz profunda y sensual le propuso a Alseide que aceptara su alma a cambio de un beso. Alseide que no le andaba a la zaga ni en seductora ni en traviesa, vio la oportunidad de bajarle los humos a ese arrogante diablillo, que creíase mas listo que ella así que acepto, con la intención de hacer sufrir al ángel caído lo indecible antes de devolverle el alma. Cerrando pues ambos los ojos se dieron un beso largo y apasionado que a la postre cambiaria el destino de ese incipiente mundo.

    Acabo ese beso como acaban todas las cosas buenas de la vida, demasiado pronto y demasiado mal para ambos, porque justo despues de separar los labios los dos se miraron y no pudieron sostener sus vanidades ni un segundo más. Así que Alseide quiso devolverle inmediatamente el alma a ese diablo tan tierno en su fondo. En cambio Malaquías vio su alma demasiada poca prenda para tan sublime momento y sintiose miserable de pensar en recuperarla seduciendo a tan dulce criatura así que no quiso aceptarla bajo ningún concepto y se fue por donde había venido con una herida tan grande en el corazón que hasta se sintió afortunado de no tener alma que la agravase. Quedose con la misma sensación Alseide maldiciendo el momento en que decidió aceptar el trato de Malaquías.

    Pasaron varios días, Malaquías escondido en la profundidad del bosque sin comer no beber y al borde de caer enfermo y Alseide en su vergel igualmente sin comer, ni beber, ni dormir, únicamente pensando en como podía solucionar este fatal cruce de caminos, hasta que se le ocurrió una idea, Malaquías nunca aceptaría que le devolviera el alma que perdió por inconsciente pero podía regalarle la suya propia como pago por haberla permitido descubrir esas nuevas sensaciones desconocidas hasta entonces, así quedarían los dos con un alama aunque fuera la una el alama de el otro y viceversa.

    Con su plan concebido y con una determinación inaudita salio el hada de su vergel por primera vez en la vida, en busca de ese diablo, le encontró al poco rato, en un pinar cercano, ya que Malaquías no había sido capaz de alejarse mas que unos pocos metros del jardín de Alseide y le propuso ese extraño cambio al que el ángel caído no puso ningún reparo pensando en que quizás fuera la solución a esa extraña enfermedad que sufría. Y al completar el cambio de almas nació una cosa de la cual hasta entonces ni siquiera habían oído hablar en ese joven mundo. Nació el amor.

    Estuvieron Malaquías y Alseide un tiempo disfrutando de su recién descubierta pasión y el mundo al completo volviose tan hermoso como el vergel de Alseide y tan excitante como los miles de caminos que había seguido Malaquías en su azarosa vida pasada. Hasta que Satanás el rey de los diablos, que nunca duerme y que si que albergaba el germen del mal en sus entrañas, diose cuenta de tal descubrimiento, y envidioso como siempre, fue incapaz de que tanta dicha fuera para uno de sus inferiores y empezó a pensar en que podía hacer para hacer fracasar tan noble sentimiento….

    Hasta que un mal día encontró la manera; Decidió utilizar sus malignos poderes para trasformar a todos sus súbditos diablos, sobre los cuales tan solo su magia era efectiva, en horrendas criaturas mitad cabra mitad hombre, que es el aspecto que hasta hoy en día han conservado, seguro de que con tal aspecto Alseide seria incapaz de seguir queriendo al noble Malaquías y así lo hizo repartiendo mal y dolor por toda la faz de la tierra.
    Es Por eso que desde ese momento los diablos, avergonzados de su aspecto, viven escondidos en los confines del infierno, amargados y torturando al todas las almas que caen en tan aciago lugar. Todos menos uno, en Malaquías la magia de lucifer no fue tan potente ya que su alma de hada le protegió en parte, y tan solo se volvió un poco más bajito más delgado y desgarbado y con un rostro menos agraciado que antes. Cosa que suplió con creces su encanto, su alegría y sobre todo el amor que Alseide sentía por el.

    Así pues es desde ese inicio de los tiempos, que el mal existe sobre la tierra por causa de la envidia de el maligno Belcebú y los enamorados intercambian sus almas para protegerse de el. Y es también gracias a los descendientes de Malaquías y Alseide por lo que las chicas más hermosas e inteligentes, acaban enamorándose de tipos más bien feos aunque alegres, simpáticos y con un toque seductor que parece sacado del mismísimo infierno.
     
    #1
    Última modificación: 27 de Junio de 2009

Comparte esta página