1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Un Mañana en el Subterraneo

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por Raúl Donoso P., 2 de Noviembre de 2006. Respuestas: 4 | Visitas: 848

  1. Raúl Donoso P.

    Raúl Donoso P. Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    2 de Mayo de 2006
    Mensajes:
    2.357
    Me gusta recibidos:
    25
    7.55 de la mañana, pasó a dejar a mi hijo al colegio, su sonrisa ancha se despide como cada mañana, con un besito tan cálido, que llena de placer mi espíritu, lo veo entrar a ese inmenso establecimiento pintado de celeste con una gran entrada de fierro, que hace el limite entre la calle y las aulas, brrrrrrr..., día frío es el de hoy, la escarcha en los vidrios de los automóviles, me froto las manos, les doy un poco de vaho y comienzo a caminar por estas calles, que me han cobijado desde niño, con la cabeza metida en mi chaqueta y los dedos hundidos en los bolsillos.

    8.00 de la mañana, asciendo por las escalinatas del metro (tren subterráneo) y me apresto a forcejear por entrar, espero esta vez tener un poquito más de suerte en donde me ubique y baje algún pasajero, de este apretado, pero rápido transporte, la estación es elevada se cuela el frío por todas partes, veo el cielo gris y con ganas de llorar, más mi pronóstico es nieve, pues el frío no permitirá la lluvia en gotas, si no, en copos, llega la máquina, entro sin mayores problemas, hoy he tenido esa pizca, que dan buenas ganas de comenzar el día, dentro está más calientito me acomodo al centro del vagón, hasta puedo hojear mi libro que llevo, “El Muro” de Sartre, autor que hace rato quería leer, estoy en uno de sus episodios que llamó “Intimidad”.

    8:05 próxima estación, se me acabó la suerte, entran varias personas más, uf!!.., quedo entre una mujer baja media regordeta, que su olor es agradable y un hombre de terno, pero con una barba insipiente, como esas de actor, pero para serles sincero no le queda, bueno es una opinión de hombre, me dejan justo el espacio, para continuar mi lectura...., “Lulu pasó ligeramente la mano sobre la cadera de su marido......, Henri gruñó pero no hizo ningún movimiento. Reducido a la impotencia..:”, me bamboleo tratando de no perder el equilibrio, pues alguna manija de donde tomarse quedaba lejos, más mis acompañantes ocasionales, de los costados me ayudaban a no caer con la frenada en la estación siguiente, sube más gente, no se donde cabe más, los olores se mezclan, es de mañana con frío fuera, todas las ventanillas cerradas, entra el aire cuando se detiene, mmmmm.., que fresco me agrada, una mujer de cabellera rubia teñida se pone delante, su vestir es ceñido, más el cinturón grueso que usa realza sus caderas, acaba de lavarse su cabello, pues me da en mi nariz su húmedo, pero agradable aroma, su cartera bien afirmada debajo del brazo derecho, trato de continuar mi lectura haciendo una especie de contorsionismo circense, que ni en mis juveniles años los habría hecho, quedo en una posición, mmmmmmm..., expectante, ustedes se preguntarán ¿por qué?.., pues la mujer de delante se comienza a apretar demasiado, ya no sé si el vagón tan cerrado o la posición me hace sudar, menos mal mi perfume en la piel, comienza a funcionar y la lectura se hace más difícil..., “...se debería poder amar todo en una persona, el esófago, el hígado y los intestinos.......... Entonces las estrellas de mar deben amar más que nosotros....”.

    8:15 siguiente estación, se abren las puertas sale una persona entran tres, increíble entran más que salen y los que ya estamos nos apretamos más, la mujer de delante comienza a moverse, no soy degenerado, pero tampoco de palo, uf!!...., que situación, entre el movimiento del tren, las aceleradas y las frenadas, ya mi masculinidad empieza hacer su aparición, trato de darme vuelta, mis ojos piden auxilio, más mi pareja de vagón, se hace la desentendida, supongo, pues no hace nada para salir, al menos correr una poquitín sus nalgas de mi virilidad, que a esas alturas, esta completamente erecto.... y no me cabe duda que lo está sintiendo, pienso pongo la mano, no, hay si pensará que soy desviado, el libro, si el libro....., lo cierro y lo bajo hasta que sea una muralla entre esas nalgas tan redondeadas que sobresalían de su cinturón y mi avergonzada, pero siempre lista virilidad...., oh!!..., que alivio estación combinación acá me bajo, para continuar mi viaje por la línea, esta vez subterránea, ya no hace frío todo es cálido acá dentro, más mi temperatura se había ido a las nubes, mis mejillas deben ir rosaditas..., deje a la mujer atrás y me dispongo a caminar hasta mi próximo vagón.

    8:25 bajo las escaleras donde veo mucha gente esperando el arribo del tren, calculo deben haber cuatro hileras, hacia atrás, de personas me ubico esperando mi turno para entrar, llega el tren, luego otro y otro, pienso en este si tengo que irme sea como sea, pues ya estoy atrasado, al menos ya estoy ubicado en la segunda fila, atrás de mi, mmmmm...., no sé, cuanta gente más hay, bueno llega bajan varias personas, como el carro, queda semi-vacío el tropel avanza enfurecido empujando, es infernal, no me detengo entro casi en vilo, algunos alegan otros sólo siguen, yo quedo pegado al vidrio, con mi cara en humorística posición si logran verlo del otro lado, logro darme vuelta con dificultad, se que esto dura sólo una estación, pues en la siguiente baja mucha gente, por fin llega quedamos sólo unos cuantos, con el carro solo para nosotros, no se imaginan que felicidad, puedo continuar con mi libro.... “...me da miedo cuando está duro y totalmente derecho: tiene un aspecto brutal...... Yo amaba a Henri porque su pequeña cuestión no se endurecía nunca...”...., de vez en cuando levantaba la cabeza para ver donde voy y me sumergía en estos personajes tan extraños, que abundan en este libro, pero que existen, quizás sea uno de ellos la señora que va a mi lado, con cara de sueño o el tipo que se rasca la panza mirándose detenidamente el poco pelo que va quedando en su azotea o la chica de piel blanca que va sentada mirando un libro detrás de sus anteojos, sea uno de ellos, se ven tan “normales”, más no se sabe cual es su intimidad, que Sartre relata en forma tan subyugante.

    8:30 continúo mi lectura... “... pero no es Rirette quien debe decírmelo, con ella todo parece simple y fácil; se ama o no se ama; pero yo no soy tan simple...”, se detiene el vagón, abre las puertas, bajan más personas, yo enfrascado en el libro, sólo siento que pasa todo aquello a mi alrededor, se comienzan a cerrar las puertas, levanto la cabeza, observo el letrero en donde está el nombre de la estación......., ¡¡¡MIERDA!!!..., acá me bajo, doy dos pasos hacia la entrada, se juntan las puertas casi en mis narices, comienza a moverse, quedo adentro mirando como se aleja el lugar donde debía bajarme...., suspiro, me sonrío, pienso deben de estar mirándome, algunos con gestos de compasión, otros graciosos, bueno ya me pase..., cierro el libro, atento a la próxima parada, bajo en ella, cambio de anden, subo de vuelta al otro tren, no vuelvo a abrir el libro, pues la lección la he aprendido........., por hoy...., hoy que a comenzado tan bien..., con la hermosa sonrisa que me ha dado Agustín.
     
    #1
  2. Maria Laura Del Aquila

    Maria Laura Del Aquila Poeta veterano y reconocido en el portal.

    Se incorporó:
    28 de Febrero de 2006
    Mensajes:
    2.896
    Me gusta recibidos:
    17
    Si que tenes pasta para esto, describes casi a la perfección cada situación, nos metes dentro de ellas y me descostillo de risa con cada personaje... vas del humor, al amor, pasando por momentos de dura fricción, por momentos insostenibles.... jajajaja. Me encantó leerte en esto que haces muy bien


    María Laura
     
    #2
  3. Raúl Donoso P.

    Raúl Donoso P. Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    2 de Mayo de 2006
    Mensajes:
    2.357
    Me gusta recibidos:
    25
    Ma. Laura..., gracias por tu comentario, es un tópico que para mi está en pañales y recien empiezo a dar mis primeros pasos, es por eso que tu comentario lo recibo con mucho gusto...., un abrazo amiga.
     
    #3
  4. Dago

    Dago Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    30 de Mayo de 2006
    Mensajes:
    2.197
    Me gusta recibidos:
    16
    Género:
    Hombre
    Bueno amigo me costó, pero lo logré, llegué a tu historía, 10.23. empece a leer y sin darme cuanta ya estaba ensemismado en tu fresca (o fria, por el clima ) historía, 10.26 empece a reirme con la anepdota de la correa ancha, 10.28 comence a dudar de tu moralidad y etica, 10.30 agradecí a ese libro cubredor de tus instintos carnales, 10.35 me entró la pena por tu distraido accidente, 10.38 termine muy complacido la historía. (Soy un poco lento para leer) CONCLUSIÓN: Me metí en la historía. Debería ser suficiente comentario.
    Tu amigo Dago
     
    #4
  5. Raúl Donoso P.

    Raúl Donoso P. Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    2 de Mayo de 2006
    Mensajes:
    2.357
    Me gusta recibidos:
    25
    Amigo...., veo que te has metido en el cuento y eso ya es un logró, me agrada que te hayas atrevido con este cuento-cronica, pues es uno de mis primeros acercamientos...., un abrazo amigo.
     
    #5

Comparte esta página