Una mirada infinita

Le vi acaecer de mariposas,
abierta de estaciones en mi pecho,
con su piel adobada de amapolas
aquí donde se juntan alma y verso.

De mi sangre escaparon las palomas
que emigran de mis manos a su cuerpo,
los hilos de la noche a toda hora
cosieron nuestros labios de silencio.

Sus ojos son enormes si me miran
tomarla sin relojes por la noche,
por todos los lugares donde escriba,

donde haya una emboscada de canciones,
o muera algún estío en mi poesía
para nacer de nuevo, en mis amores...

 

Divino poema. Qué bueno que hayas vuelto a brindar de nuevo tu poesía por aquí.
Gracias por compartir.

 

INSPIRACIÓN DIVINA, TATUADA EN POESÍA.
Sosegante lectura de un soneto con clase,

 

Luminoso y vibrante el latido de tus versos querido amigo...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Qué lindo poema!
Un placer leer ésta sensibilidad tan especial.

 

Vine a buscar este poema porque cuando lo leí no estaba conectada y la verdad me encantó. Muy muy hermoso y vibrante, lleno de apasionamiento. Felicidades por regresar a tu pluma tan lleno de energía e inspiración. Es un gusto disfrutar de tu talento. Un abracito tierno, amigo.

 

Estimado Dario...
Celebro que hayas regresado con tu mágica y excelsa poesía, porque es un enorme placer disfrutar de cada una de ellas, y muestra de ello es este hermoso poema. Un cordial saludo, Poeta.

 

Mi admiración para su talento poeta, saludos

 

Armonioso y musical, grato, de esos poemas que se leen como canciones.
Muy hermoso, te felicito.
Saludos cordiales, poeta.

 

Muy bello y expresivo, sugerentes imágenes al servicio de tu gran sensibilidad amigo Daríio. Un abrazo. Paco.

 

Precioso soneto Darío, de un corazón fervientemente enamorado al grado de perderse en una mirada, un enorme placer leerte, besos.