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Una prosa sin prosa pero también sin estilo

Tema en 'Prosa: Melancólicos' comenzado por abcd, 15 de Diciembre de 2013. Respuestas: 0 | Visitas: 376

  1. abcd

    abcd Poeta adicto al portal

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    Muchas veces asocie el rostro de ella con una lluvia que jamás ocurrió. Era como ver relámpagos de azúcar sobre una taza de café o esperar en el climax frío del arcoiris un suceso de naves chocolatadas derritiéndose por amor. No se, también era algo como imaginar que dos trenes brotaban de sus ojos, sí, dos trenes que se volvían flores de carne mientras el ácido de algún recuerdo enfermo les comía las raíces que no tenían.

    Muchas otras veces me indispuse al cambio y jugué con cartas a apostar que sus lágrimas llegarían a formar un volcán. Es absurdo el silencio que evacúa mis sentidos por momentos, pero ahí en la catarsis ella era el único espejo que reflejaba al vampiro sediento de nostalgia que suelo pensar ser. Ella, en el cuento de los retazos, escupía a todo noble acercamiento de almas, para ella los cuerpos son posesiones sin prisiones por escoltar, con esto digo que era libre en eso que otros no esgrimen como libertad.

    Los otros pecados que dormían en mi burbuja eran pecados de desnudistas faltos de fiebre.Una vez que lograba invadir el espacio onírico del sujeto que la acompañaba, su cama y mi cama eran un vertedero de esperanzas. Ahí la lluvia tomaba colores ornamentales, del rojo al verde hay un suplicio, del naranja al limón hay un orgasmo y más. Las otras culpas quedaban en la almohada, en lo abiótico que es también peregrinación. Después o antes de pertenecer al licor de las mañanas,nos convertíamos en un mismo túnel, nos viajábamos sin tocarnos en un oscuro pasadizo de malas intenciones. Yo la quiero, pero ella me quiere.

    La verdad es que tenía un hueco en el pecho, que solo una falta de prosa griega me iba a poder tabular el raciocinio. Me seduje como siempre en una mentira de esas blandas, donde el escarpelo del ojo social no sabe o no puede mirar, deje en el borde cínico de la pasión un siniestro desmembramiento de felicidad. Todo es armoniosamente incierto, como esto de ser pez y caminar y volar al lado de este también muerto celular.
     
    #1
    Última modificación: 15 de Diciembre de 2013

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