Una simple mancha

Todos hablan de no recordar el momento exacto de su creación, tal vez nunca lo he recordado pero lo he creado en mis neuronas como una ilusión real, algo bastante extraño pensando que una ilusión es algo creado por la mente y en ocasiones difícil de ser lo correcto para muchos, es más similar a lo irreal que a lo real y palpable. Aun así, Puedo ver el momento muy claramente, exactamente cuándo se encendió esa gigantesca luminaria y voló el cuerpo como una luciérnaga atada por un tentáculo interminable, saliendo de los interiores de la gran mujer que dejaba sordos a los participantes con esos gemidos que aturden ideas.

Las primeras imágenes junto a esos rostros fue en los sueños de niñez, los cuales antes de flotar a la superficie no se caracterizaban por esa gigantesca sonrisa de conquista y descubrimiento o ¿Acaso mi renacer era producto de la sonrisa de los extraños, o simplemente, el vuelo fue provocado por el superior para que los que se creen idénticos se sintieran aliviados luego de la gran lucha? Quien sabe, ni siquiera sé lo sucedido antes del primer suceso, aunque haya creído en ciertos momentos haber conocido por algunas visiones, sueños y hechos semejantes, el desenlace de la historia fatal.

Ya no había tiempo para cuestionarse la razón, proceso o circunstancia del primer destello de luz, esto sucedió porque el camino se abrió y no se podía mirar durante más horas la misma roca. Sin darme cuenta el camino se transformó en un gigante aluvión de la evolución propia y ya estaba sucediendo, en mis pies se notaban las pisadas más firmes y los rasgos duros y envejecidos.

Aunque en ocasiones fuera tratado como esas mujerzuelas de la calle y mis lágrimas se derramaran por toda la ciudad, yo fanatizaba con un secreto interno, un poder y una futura revolución mental. Ya no era el tiempo cómo para ser un soldado corpulento, de esta gran masa de militantes conservadores, porque sabía que el quiebre era inminente y que cualquier derrame de estupidez masiva sería el chispazo para el golpe máximo, en el momento indicado. No habló del primer momento que ya viví y que analicé durante el pasado y a veces también en la actualidad, hablo del gran momento, destello y quiebre para tomar la decisión de quedarme absolutamente solo. Quizás viviría mi futuro más solo que el general de mis aliados pero con el orgullo de sentir que puedo tomar determinaciones, sea como sea el lugar donde me encuentre, sigo felizmente aislado pero aún más feliz de ser libertario en alma personal.