1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Versos en la mente 1ra parte

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por E.M Romeo, 7 de Junio de 2010. Respuestas: 0 | Visitas: 602

  1. E.M Romeo

    E.M Romeo Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    22 de Agosto de 2008
    Mensajes:
    61
    Me gusta recibidos:
    1
    Género:
    Hombre
    El sitio socorrido por una de las fiestas más reconocidas de México, lugar místico y enorme por los sucesos acontecidos en sus calles y callejones, cada roca incrustada en sus recorridos y fugaces caminos inclinados en su mayoría. Generalmente abatido por la muchedumbre que busca un momento, para el de despeje de su mente, aunque para algunos sea un infierno del cual nunca se podrá salir,… ahí, en ese esplendoroso lugar lleno de cultura, que año con año tiene participe de la celebración del “CERVANTINO”,… que visita a visita siempre es buscado el legendario callejón en donde se cuenta acerca de una pareja de enamorados, la cual al tener un espacio tan reducido entre sus balcones, sabia que la facilidad de darse un cálido beso era eminentemente grande. Los grandes jardines, la gente tan sonriente siempre, la belleza arquitectónica en sus iglesias y teatros, la alhóndiga de granaditas manchada por las hazañas del Pípila, todo eso y más es la ciudad de Guanajuato, pero a decir verdad también hay cosas que ocurrieron y hasta ahora son difíciles de recordar, aunque fáciles de contar si se quiere sacar a la luz el valor de la vida humana…



    ,… -¿Volveré a ser como antes?, ¿Tendré el valor esta vez? –Preguntas tontas tal vez para alguien como yo, alguien sin futuro, sin presente, sin pasado, sin esperanza en la vida. -¿Tendré una vida normal algún día?- Aunque ya era normal para mi en esos días. -¿La volveré a ver?- Esa pregunta solo me hizo caer en las profundidades de mis recuerdos…
    ¿Un sueño?, tal vez, eso era lo que siempre pasaba por mi mente una y otra vez antes de volver en mi,… pero ¿Era realmente un sueño?, no lo sé hasta ahora, quizás en verdad ocurrió, solo que en una vida pasada, no es que crea mucho en la reencarnación, pero en este momento quizás sea mi salvación…
    Todo se veía negro ese día, desperté y todo se miraba negro. No se escuchaba nada, me levante de la cama y no escuchaba nada. De momento todo era confuso, hasta que escuche por primera vez en toda una vida transcurrida en un día,… escuche la voz de un ángel…
    -¡Josué!, ¡Josué!, ¡Vamos, levántate!-
    La confusión desapareció como arte de magia y la oscuridad igualmente se perdió en el pasado. Esa persona quien me acaba de rescatar es quizás la mujer más importante en mi vida, su nombre es María, aunque no sé como es que entro a mi cuarto sin que me percatara de su intromisión, mientras aun dormido ella decía…
    -¡Rápido!-
    Alguna forma habrá encontrado durante estos 7 años de conocernos, por cierto resulta sospechoso que una adolecente de 15 años entre al cuarto de un chico de 16 años a hurtadillas, pero por alguna razón mis padres nunca se han preocupado por ello, sin embargo eso es algo que a mi si me preocupa, porque si mal no lo recuerdo su casa esta junto a la mía,… eso no es lo que me preocupa, es que estamos en un 5 piso y eso significa que solo hay dos formas de que ella entre a mi habitación. Una sería por la puerta de este cuarto, pero antes tendría que abrir la puerta principal y únicamente mis padres tienen la llave, la otra forma es que desde su ventana se deslice hasta la de mi habitación y entre, pero eso sería algo imposible,… supongo que después de todo mis papás le dieron una copia de la llave, para que no los moleste. La duda iba de un lado al otro en mi cabeza, así que no pude más y pregunte como acostumbraba ya.
    -¡¿Por donde rayos te metiste?!-
    No soné tan tierno como la primera vez que lo hizo, pero me preocupaba la respuesta.
    -Pues por la ventana.-
    Respuesta directa a mis temores, no pude contener mi enfado y le hice saber mi preocupación también.
    -¡¿Qué?!-
    Era notorio mi cambio de ánimo respecto a esas visitas por la mañana en mi casa, solo para despertarme con sus gritos, pero rectificó a tiempo su respuesta.
    -Era broma, en realidad tengo una copia de las llaves de tu casa.-
    Al menos la preocupación por su vida desapareció, pero ahora aparecía una preocupación por mi vida,… por alguna cosa de ella solo me iba a despertar los sábados y nunca otro día diferente, nunca le pregunte, era algo irrelevante, aunque un poco extraño si lo pienso mucho. Ese sábado igual que todos los anteriores en 7 años, nos íbamos al jardín justo en frente del teatro que lleva por nombre el de uno de los principales héroes en la historia de México, “Juárez”,… caminábamos, comíamos nieve de limón y después íbamos hasta un lugar mágico, ese lugar era sin duda el callejón del beso. Durante todo el paseo María solo me ignoraba, pero al llegar al sitio final ella me pedía siempre lo mismo, eso era que le contara la historia acerca del titulo de “Callejón del beso”…
    -Siempre te cuento la misma historia, mejor te cuento otra.
    Le dije sin pensar que le enfadaría mi intención.
    -¡No!, ¡Quiero que me cuentes la historia de este callejón!-
    [FONT=Arial]No me quedo más que ceder ante sus exigencias.
    [FONT=Arial]-Esta bien, lo hare.-
    [FONT=Arial]Y así comencé con la eterna historia de los dos enamorados que al tener por interferencia un pequeño espacio entre sus balcones podían darse un beso cada que lo quisieran. Exactamente al terminar la historia siempre se seguía de largo y corría fuera de mi alcance, siempre se iba contraria a la calle estrecha antes mencionada. Tal vez quería que la siguiera, tal vez quería que la detuviera,… nunca supe que hacer en ese momento en el que la duda le ganaba a la razón,… así siempre se iba directo a su casa y no la volvía a ver durante todo el día, hasta la noche. Ya para la comida mis papás estaban en casa preparando la mesa, mi mamá siempre con un delantal cosido a mano que le había regalado mi abuela, mi papá siempre de un gran humor y con un apetito enorme. Ahora me pregunto: ¿Por qué siempre se sentaba en el mismo lugar mi papá?, ¿Por qué siempre cocinaba lo mismo mi mamá?,… pero luego me sentaba y al verlos tan felices me daba igual lo que pasara por mi garganta, fuera caldo de pollo o cualquier otra cosa, solo me dedicaba a comer mi rasión y me retiraba a mi cuarto, sin que una ligera plática surgiera con mis progenitores, ¿Sería por que no tenía nada importante que decirles?, igual que ellos a mí, quizás esa era la razón.
    [FONT=Arial]Según el calendario, el siguiente día era domingo 16 de Mayo de 2010 y no tenía más que hacer que la tarea de la escuela, como si esto fuera gran sorpresa, ya que todos los domingos hacia lo mismo, ir a la biblioteca y buscar toda la información acerca de los trabajos que me dejaban, era suficiente con tomar un par de libros y ojearlos durante un par de horas, pero aun era sábado y apenas se asomaba la luna, era raro para mi ver una luna tan hermosa, una luna descubierta por completo, con esos aires de romanticismo, con esos reflejos de sol, que alumbraban las calles de la ciudad, digo que era raro por un solo motivo y ese era que todos los sábados que recordaba, por la noche salía luna nueva, en cuarto menguante o en cuarto creciente e incluso media luna, pero nunca luna llena, sin duda era un día especial. Nunca creí que vería una noche tan perfecta, era precipitado decir eso, ya que segundos después de quedar justo frente a mis ojos la luna completa, entró a mi cuarto con gran impaciencia María,… Siempre vestía a esa hora un mismo vestido y zapatillas, de hecho nunca la vi usando algo que tuviera tacones, supongo que no podía usarlos, pero sin duda esa era la parte más interesante, ya que le quedaba hermoso ese atuendo, junto a cualquier chica de mi preparatoria se vería como una diosa. Por cosas sin importancia como esa es que disfrutaba compartir las noches de los sábados con mi mejor amiga y quizás la única, esa solo podía ser María. La noche se iba a prisa y solo nos dedicábamos a verla sin platicar, ni hacer ningún movimiento, era ya costumbre actuar de esa manera, quizás porque era una noche especial o porque no sabíamos que hacer después. Al final de la noche ella solo se marchaba sin decir un solo adiós, como si no estuviera ahí, solo volteaba, sonreía y se iba a su casa, cosa que yo agradecí, pero a la vez me dejaba con un gran vacio, como si quisiera decirle algo antes de que se fuera, pero no sabía que era eso tan importante que quería decirle.
    [FONT=Arial]El domingo también había cambiado en las últimas semanas, recuerdo que con anterioridad solo me dedicaba a estudiar, y aunque lo hacia también en estas fechas, ya no era para mi lo mismo,… tal vez era porque algo me ocurría sin que yo lo supiera, o aun sabiendo lo que me ocurría, yo no quería aceptarlo,… quizás solo estaba cansado por tanto esfuerzo en los estudios, pero la realidad es que no era tanto esfuerzo, solo leía unas cuantas paginas y hacia mi trabajo, nunca me pareció algo con mucha dificultada, nunca hasta ahora, aunque desconocía el por qué. Tras terminar con mis deberes como estudiante, me dirigía al mismo jardín de siempre, ese sitio repleto de recuerdos y anécdotas que me dan felicidad cada que en días como estos me siento en una de sus bancas a descansar y recordar.
    [FONT=Arial]¿El silencio?, era algo que pocas veces tuve a lo largo de mis 16 años, tal vez era debido a que todo el tiempo estaba a mi lado la ruidosa, pero amigable María, ese domingo no fue la excepción, desconozco la forma en que se entero que estaba descansando justamente ahí, pero apareció con una cara de felicidad como todos los días, los rayos del solo cubrían la mayor parte de su cara, pero eso no me impedía saber de quien se trataba, ¿Quién más podría ser?,… mejor dicho aun, no podía ser nadie más que ella. Como dije este domingo parecía diferente a cualquier otro domingo rutinario anterior, se podía palpar en la fresca sombra de los arboles un cambio de ritmo en mi vida,… sería tonto que me pusiera a pensar en cada cosa que cambia en mi vida, pero con una vida como la que llevaba hasta esos días, era algo imposible de no hacer. Mi memoria cada vez era más mala, así que valía la pena ver la diferencia de cada momento en mi vida, un gran giro a mi rutina fue ver sentada de pronto a mi lado a esa chica que sin dudar me ofreció su amistad sin siquiera saber mi nombre, ese día, aquel día en que la lluvia parecía comerse el suelo, aquel momento tan inolvidable hace 7 años. Las calles eran ríos, los callejones semejaban rápidos, las casas sin duda pude notar como se cuarteaban con los golpes furiosos de la naturaleza, pocas veces la vi tan furiosa, así fue como yo al no poder llegar a mi casa y tras ser derribado el paso de un caudal, fui enviado corriente abajo, no sabía que hacer, debido quizás a que nunca me había pasado algo parecido, sin dudarlo alce mi mano para que dios la tomara, un niño como yo en ese momento tenía que recurrir a la voluntad del creador, aunque nunca espere que sucediera, en el fondo de mi corazón y en silencio sabia que no era momento de mi despedida a este mundo, así que puse empeño en mi mano y escuche una voz más fuerte que los latidos de mi corazón en ese instante, una voz que decía –¡Coge la cuerda!- con una gran preocupación y a la vez una gran esperanza. Sin pensar en mis actos lo siguiente que supe, es que cerré mi mano con una fuerza considerable y tenía en mi mano la punta de una cuerda, el agua me impedía ver claramente la forma de la persona que me había salvado, pero si de algo estoy seguro es que tenía que agradecer pues había salvado mi vida. Sin esperar más tiempo a que la corriente me arrastrara más, tomé con ambas manos la soga y fui alado hasta la orilla, en donde me esperaba mi salvador,… abrí los ojos y vi la luz en los suyos, la lluvia parecía no haber terminado aun en sus ojos, aunque la lluvia había terminado en la ciudad, más halla de darme cuenta de sus lagrimas, me pude dar cuenta de que era una niña a la que le debía mi vida, parecía una muñeca, era tan linda, tenia un pelo dorado como el mismo oro no lograría ser, tenía unos hermosos ojos verdes, tan hermosos que las esmeraldas parecían simples pedazos de piedra a su lado,… tenía también una piel rosada y delicada como la de un bebe, no me cabía en la mente como había podido sacarme de la marcha del caudal. Sin poder decir más que gracias una tras otra vez, ella se limito a decirme con la misma intensidad con la que me hizo tomar la cuerda y sostenerme de ella -¿Estas bien?- yo no sabía que contestar, ¿Estaba bien?, ¿Había estado bien antes?, ¿Podía estar bien?, esa fue la primera vez que me asaltaron tantas dudas en la mente. Tal vez eran los casi 5 litros de agua sucia que bebí al estar corriente a bajo los que me hacían no saber como estaba, pero siempre tuve la boca cerrada, así que no bebí nada,… nunca antes me había complicado tanto para dar una respuesta tan simple, como un si y como no pude decirlo solo me levante y asentí con la cabeza en símbolo de mi bienestar, la calma floreció al salir el sol y con él un pedazo del cielo se convirtió en una sonrisa en la cara de la chica, de la cual no sabía aún su nombre,… y no necesitaba saberlo para comprender que debía agradecerle como se debía, así que dispuesto a darle mis más sinceras gracias ella solo me tomo de la mano y me dijo con sutileza. –Me llamo María ¿Y tú?-
    [FONT=Arial]La delicadeza de sus jóvenes labios era algo nuevo para mi, jamás antes me había fijado en cosas como esa, a mis 9 años de edad solo me importaba jugar o ir de un lado a otro corriendo sin beneficio alguno, pero ese día un extraño sentimiento de inestabilidad entro en mi pecho,… tras darme cuenta del cambio solo me quedo decir mi nombre con algunos ligeros tartamudeos.
    [FONT=Arial]-Yoo, me llaamo Joosué-
    [FONT=Arial]El solo hecho de que me sonrió, hizo que un botón de amistad avivara en mi interior, ahí sin más que solo su mano extendida me propuso ser su amigo, es algo raro ver que eso suceda, pero así fue, más tarde me di cuenta que vivíamos en el mismo edificio y no solo eso, sino que también vivía en un departamento al lado de la nuestro. Los años pasaron y cada vez era más apegada a mí, como una hermanita pequeña con su hermano mayor, aunque esto sea más común en Japón, tarde o temprano mis papás se tenían que enterar de su existencia, no fue hasta cuando estaba en primer grado de secundaría que ellos la vieron junto a mi y enseguida supieron que se trataba de la hija de la vecina. Sin dudar mis padres le hicieron la invitación abierta a que cada vez que quisiera ir a nuestra casa fuera si así lo quería, porque de su parte no habría ningún problema,… y hasta ahora me doy cuenta que le dieron una replica de la llave del departamento. En verdad me cuesta trabajo entender la intención de mis padres, pero supongo que nunca fui una persona sociable y María era mi primera amiga, tal vez eso era, de cualquier forma era algo extremo darle libre entrada a esa chica sin pensar dos veces en las consecuencias,… como sea, ya no tiene mucha importancia quejarme de algo a lo que ya me he acostumbrado, ó quizás eso sea lo peligroso.
    [FONT=Arial]Me vienen recuerdos a la mente y no es que recuerde todo exactamente, pero si logro ver cosas que había olvidado, aunque cuando hago eso, vuelan miles de preguntas a mi cabeza…
    [FONT=Arial]-¿Cuándo fue que pasó?, ¿No es un sueño?, ¿En verdad soy yo?-
    [FONT=Arial]Nunca les pongo mucha atención a esos cuestionamientos sin fundamentos, porque no los tienen, también cabe la posibilidad de que si los tengan y yo los haya extraviado en mis memorias, cual sea el caso, solo sé que por ahora soy feliz y no hay porque dudar de mi realidad.
    [FONT=Arial]Cuando duermo, una extraña sensación de soledad llega hasta mi y poco a poco se va comiendo mis recuerdos, mis experiencias, pero al ver por la mañana a esa chica con una sonrisa tan pura, me doy cuenta de que todo esta perfecto y recupero totalmente los recuerdos perdidos, además de que esa soledad se marcha por completo, sin duda María arregla todo lo que en mi está mal, pero ¿Quién es María?, esa pregunta es algo que llevo años haciéndome, la repuesta la tengo, pero no me convence del todo, tal vez sea errónea, aún así mi respuesta sería…
    [FONT=Arial]-María es un chica de 15 años la cual tiene 7 siendo mi amiga, es muy bonita, además es inteligente, aunque no sé si sea verdad, ya que va a una escuela diferente, también es amigable, cariñosa, a veces un poco tediosa, temperamental, sentimental, pero la mayoría del tiempo es buena persona, aunque nunca he visto a sus padres y no habla mucho sobre ellos, deben trabajar mucho y por eso no la he visto con ellos, supongo que no hay de que preocuparse y para ser sincero no sé si me incumba meterme en esos terrenos con ella, sin embargo sería bueno ver a su familia por un momento y mostrarles un poco de gratitud por dejarla ir a mi casa todos los días, sin que los prejuicios de que ella es una mujer y yo un hombre en la edad del despertar sexual, cosa que me tiene muy preocupado, porque sea como sea es mi única amiga y nunca he hablado con otra chica, debería decir que ella me atrae un poco, aunque es imposible que ella piense en cosas como las que yo pienso, ella es tan pura e inocente.
    [FONT=Arial]El lunes la vida se vuelve un poco atareada, los compromisos se incrementan de una forma inusual, la escuela se vuelve mi madriguera día y noche, hasta que al profesor le apetece dejarme ir, como les digo, no soy muy sociable incluso en la escuela, por cierto esta escuela es parte de la Universidad de Guanajuato, una antigua instalación que goza de una arquitectura impresionante,… En mi salón hay 24 alumnos, de los cuales solo conozco el nombre de algunos cuantos, la realidad es que solo conozco a los más inteligentes, eso es porque son los primeros de la lista,… la forma en la que los maestros han llevado la lista es algo perturbador, ya que conforme a las calificaciones nos acomodan en la lista, de tal modo que yo soy el sexto lugar y los anteriores cinco puestos son para los cerebritos, es algo que me saca de quicio, pero no se puede hacer nada para corregir los métodos obsoletos de los que enseñan en esa preparatoria, sin embargo…
    [FONT=Arial]-¿En verdad enseñan de esa forma?, ¿La lista está acomodada así?-
    [FONT=Arial]Nuevamente me llegan esos cuestionamientos sin sentido que no me dejan poner atención en clases y tomar apuntes,… creo que le tendré que pedir los apuntes a la más inteligente de la clase, pero estoy seguro que no me los prestara, ya que no he hablado con ella nunca, de hecho recuerdo que ella estaba conmigo también en la secundaria, pero esos recuerdos están un poco borrosos y no logro ver si alguna vez me acerque a hablarle,… los lentes son algo que nunca me han gustado, pero siendo la chica más inteligente y bonita de la clase, supongo que se le ven bien, aunque es difícil acercarse a ella, pues es la presidenta de la clase y siempre esta ocupada, así que es momento de actuar e ir hacia ella con una sola intención, esta es pedirle prestados sus apuntes...
    [FONT=Arial]-¡Oye!, ¡Tú!, ¡Érica!-
    [FONT=Arial]Y pensar que sabía su nombre después de todo, ahora venia lo difícil, eso era entablar una plática para obtener al final sus apuntes de la clase de física,… sin embargo su inesperada reacción me hizo olvidar los apuntes.
    [FONT=Arial]-¡Si!, ¡Ah, eres tú!, ¡Josué!-
    [FONT=Arial]Algo extraño, pues la mayoría no sabía que me llamaba Josué, o al menos eso creía yo, lo siguiente que paso fue que me pidió que le ayudara en el salón a organizar unos papeles de un proyecto, cosa que nunca había pasado y ahí fue cuando me di cuenta de algo que me dejó estupefacto…
    [FONT=Arial]-Creí que este año tampoco me hablarías-
    [FONT=Arial]No sabía que contestar, pues no sabía el significado de esas palabras, pero algo debía decir.
    [FONT=Arial]-Pues, para serte sincero hay muchas cosas que quiero preguntarte-
    [FONT=Arial]A lo que ella solo contesto.
    [FONT=Arial]-¿Cómo que?-
    [FONT=Arial]-Tú sabes que no soy muy sociable y casi nadie me habla, ¿Por qué me hablaste tú?-
    [FONT=Arial]-¿Cómo?, ¿No lo recuerdas?-
    [FONT=Arial]-Recordar ¿Qué?-
    [FONT=Arial]-Fue hace exactamente un par de años, cuando estábamos en la secundaría, recuerdo que todos eran muy groseros conmigo, me acosaban y me querían manosear, aunque tú por alguna razón te quedabas sentado y observabas, al principio pensé que eras como ellos, igual de mala persona, pero ese día te levantaste y sin importarte que fueran 7 muchachos más altos y fuertes, te enfrentaste a ellos como si supieras que les ganarías, ese día aunque fuiste enviado a la dirección y expulsado por un largo tiempo, te quede a deber un favor, de hecho creo que nunca te di las gracias, pero te las doy ahora. ¡Gracias!
    [FONT=Arial]¿En serio había sucedido eso?, tenía dudas al respecto, pero por ahora todo estaba bien, así que acepte su gratitud y tome el valor para hacerme su amigo también, eso era algo que debía tomar a la ligera y comentar a María.
    [FONT=Arial]-Aunque no lo recuerdo con exactitud, me atreveré a pedirte un favor-
    [FONT=Arial]-El que quieras, ya que te debo una-
    [FONT=Arial],…Y me atreví,…
    [FONT=Arial]-¿Me prestarías tus apuntes de la clase de física?-
    [FONT=Arial]Nunca espere que me dijera que no, pero debía esperar cualquier respuesta a mi petición, aunque esta no fuera del todo descabellada.
    [FONT=Arial]-¿Eso es todo?,… aunque esperaba una leve diferencia en tu decisión, supongo que es difícil esperar de un favor uno más, diciendo eso solo puedo agregar una aprobación a tu petición-
    [FONT=Arial]-Si, ¡Que bien!-
    [FONT=Arial]Mi reacción fue totalmente salida con felicidad, aunque de cierta forma ella ya había saldado su cuenta conmigo antes de que le pidiera el favor, quizá lo hizo en el momento en que me conto parte de mi pasado que esta borroso en mi mente.
    [FONT=Arial]Es extraña para mi mismo mi vida, como si estuviera omitiendo algún detalle de suma importancia, como si me estuviera aferrando a no recordar una verdad eminente, pero así,… así como estoy ahora, estoy bien,… eso creo.
    [FONT=Arial]Al termino de mi plática con Érica, me dirigí a mi casa como lo hacia todos los lunes. Me fui disfrutando de las bellezas que ofrece mi ciudad natal, como si fuera el primer lunes que las admiraba, pasé por las calles principales y di en una dirección conocida, aunque poco recurrida por mi trayecto rutinario, esa calle estaba de forma paralela al teatro Miguel Cervantes e intercepta a la calle en donde vivo, pero no me llevaba de forma directa a mi destino, sino de manera alterada es que me llevaba a un lugar nuevo para mi, cosa casi imposible, pues llevaba 16 años viviendo en esta ciudad. Ahí vi sobre salir un callejón de todos los demás, pero al querer recorrerlo me entraba un pánico terrible y a la vez una gran incertidumbre, la luz del día tan caluroso se convirtió en una sombra helada y punzante, de pronto mis instintos reconocieron ese sentir y lo relacionaron a ocasiones ya vividas, lo que quería decir una sola cosa,… ya había vivido algo parecido en un pasado existente o inexistente,… más no sabía con exactitud el motivo de ese cambio en mi entorno físico, así que me limite a salir corriendo lejos de ese sitio, corrí y corrí, primero cuesta abajo y luego casi forzado, pero con la necesidad corrí nuevamente cuesta arriba con dirección a mi casa, tal vez era algo psicológico, tal vez era mera coincidencia, pero no podía descartar igualmente la posibilidad de que fuera una advertencia. Sospechosamente al ir corriendo me tropecé con la presencia de María en plena calle y poco antes de llegar a mi casa, ella me detuvo con un par de sugerencias poco atractivas para mí…
    [FONT=Arial]-¡Josué!, ¿Quieres ir a comer conmigo a un restaurante?-
    [FONT=Arial]Debí negarme, no porque no quisiera, ya que en el fondo lo deseaba, pero estaba rotundamente alterado en mis cinco sentidos,… entonces solo quería llegar a mi casa y recostarme, así pues contestando de una forma grosera y desconsiderada la deje, dándome fuga hacia mis aposentos. Al llegar a mi cuarto me percate de algo realmente extraño, bueno quizás no tanto, pero con algo de ilógica, me di cuenta de que hasta ahora nunca había usado una llave, para entrar al departamento y peor aun, sabiendo que mi papá y María tienen una copia y yo no, ¿Cómo fue que lo hice?,… al final llegue a la conclusión de que se les había olvidado cerrar con llave la puerta, pues era la respuesta más lógica al misterio. Después pensé que quizás la respuesta más lógica podía ser igualmente la más ilógica en una vida como la mía, pero ¿Qué tiene de diferente mi vida a la de los demás?, ¿Por qué ese callejón me dio pánico?, ¿Por qué María me había invitado al restaurante y no a su casa?, todas esas interrogantes me llevaron a un rotundo desgaste de energía, haciendo que cayera en un profundo sueño inevitable. El sueño fue tan extenso como un día entero, aunque solo habían pasado un par de horas, en ese momento de descanso vi unas cuantas imágenes que me dejaron pensativo. Una y otra vez las imágenes tomaron mi delirio a su antojo, convirtiéndolo en su lugar de exposición, -¿Qué significaban esas imágenes?- Decía mientras la garganta se me cerraba poco a poco,… aun las veo noche tras noche, como si algo malo fuera a ocurrirme, aunque probablemente ya me haya ocurrido, sin embargo también puede ser que me este ocurriendo o nunca ocurra, todas esas posibilidades son legitimas, esto hace que este más y más confundido con el paso de los días… Pero ¿Qué imágenes había visto?, ¿Por qué me preocupaban tanto?,… En realidad no tenían un sentido elocuente para mi, de hecho no sabría si tendrían un significado, solo recuerdo que mientras dormía vi otra vez una calle oscura, después una caja de madera y enseguida un charco de agua de lluvia,… valla que no tenía ningún sentido para mí, para ser sincero por momentos creía que si lo tenía, pero no sabía la causa. ¿Una calle oscura?, ¿Una caja de madera?, ¿Un charco de agua de lluvia?, ¿Qué relación tenían conmigo?,… -Tal vez solo fue una jugarreta de mi cansancio- Me atreví a afirmar mientras mi corazón latía en símbolo de desacuerdo. La impaciencia abordo la barca en donde llevaba de pasajera mi consciencia y el dúo con aires de comedia se volcó a uno totalmente de tragedia, la sed de mi alma liberaba a galones la esencia de mi cuerpo y aunque tibio estuviera por dentro, por fuera parecía un iceberg y de tanto templar mi ser físico se comenzó a quebrantar como las hojas en otoño,… mis extremidades danzaban un vals desacompasado y mientras mis pasos se hacían cada vez más retardos, de repente una melodía cuyo nombre desconozco, pero me llegaban prospectos para ello a una velocidad impactante me hizo ir más lejos en mis dudas. -¿Sentido?, ¿Esto tiene sentido?- No sabría con certeza que lo tiene, me pregunto ¿Lo tuvo la primera guerra mundial?, ¿Lo tuvo la segunda?, ¿Lo tienen los extremos cambios climáticos?, ¿Lo tiene Arizona al condenar la estadía de la gente latina en la urbe que es USA?,… probablemente lo tengan o lo tuvieron a su tiempo, pero igual que ahora yo no comprendo el detonador de mis dolencias, así mismo las personas se preguntan por las fallas de la mente humana al querer exterminarse a sí misma,… aunque pareciera que soy yo quien me estoy atacando a espaldas de mi fascismo corporal, emocional y psíquico, pero en realidad aún creo que hay algo muy importante que debería saber. Con tanto acomplejamiento en los oleajes de viento, lo más idóneo para mí y para cualquiera sería salir a caminar a paso moderado y desnivelado por los rincones de mi entorno social, mejor aún, divertirme con la improvisación del canto del pueblo. Al andar vagando me vino en mente. – ¡Iré a un lugar que no haya visitado!- Al caminar sin destino aparente me vi envuelto por las trampas de la casualidad al encontrarme con la única persona capaz de tranquilizar mis desvaríos, esa era María,… ahora que lo pienso, ¿Por qué solo ella?, ¿Por qué no mi familia?, ¿Por qué no Érica?, como sea,… no me importa, si al final logra estabilizarme, que sea quien me ha salvado una vez ya la que me rescate nuevamente. Lentamente las notas agónicas de la verdad se fueron sellando en lo que yo llamo la otra realidad y aunque no era de esperarse, fui siendo poco a poco cubierto por el regazo de esa chica tan singular, de esa persona especial. Estando ella tras de mi, parecía que me cuidaba siempre y cuando pensé que nada, absolutamente nada pasaría, me dijo con esos versos que solo habitan en mi mente.
    [FONT=Arial]-¿Te encuentras bien?-
    [FONT=Arial]Y de mi mente la luz conjugo su atardecer, y de sus palabras la vida inundó, cual emoción no sesgada por la impura verdad. La perdición que en mí habitaba se fue trasmutando en mero gozo, hasta pude ver lo que no veía antes, lo que mi mente me ocultaba, pero aunque pudiera ver lo que no veía, no significaba que antes no estuviera ahí, o que nunca lo haya estado hasta ahora. Y ahí fue que me di cuenta que debía creer en un estado adjunto a la amistad, un estado propio de una relación de 7 años,… luego pensé, tal vez sea demasiado pronto, aunque tal vez no lo era, luego creí, ella ya ha de tener a alguien más, pero me era imposible de asimilar y así comencé a entender que nada en mi vida tenía sentido, así como las guerras, así como la apatía interracial, así como que nunca había escuchado antes de una guerra o una reacción racista, o que estuviera vivo, nada concordaba, pero… estar como estaba en ese momento, me traía felicidad y con eso me bastaba.[/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT]
    [FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial]

    [LEFT][FONT=Arial]El tiempo pasó como nunca había pasado, la amistad con Érica fue fortaleciendo, así como sus narraciones sobre mi pasado eminentemente atrofiado en algún lugar de mi cerebro. Los pastos comenzaron a mancharse de color alegría ,y las flores de esperanza, el color de la batalla emergió en las rosas y los arboles comenzaron a mudar su ropaje, las lluvias asechaban los sembradíos, el maíz que era aun grano, se limitaba a esperar a que lo atacaran de una vez por todas. Así lucía toda la población de los alrededores, aunque la ciudad solo se sentía como siempre,… el callejón que no pude transitar aquella vez, aun me era difícil recorrer, mi amiga María, aun era mi amiga y Érica junto a sus gafas e interesantes pláticas, seguía siendo una reciente amistad. Todo era como antes, quizás no parecía extraño, pero lo era. Mis padres seguían sin decir ni una palabra durante la ingesta de alimentos, tal vez era que yo no los escuchaba, tal vez sucedía que yo no les hablaba o también que ellos no me escuchaban, pero aun así me daban una ración de comida,… cuando pensé que comería otra vez caldo de pollo, al ver al trasto me percate de la ausencia de liquido y la presencia de unos huevos estrellados, su perfecta concentración circular y color amarilla, una forma irregular con bordes entre quemados y lo demás perfectamente blanco, eso era la comida de los dioses. Por primera vez en muchos años, comía otra cosa distinta. –Esto debía significar algo- Afirmaba mientras degustaba del platillo del cambio,… al termino de esa rica innovación fui a verme con Érica, ya que días atrás había quedado en brindarle apoyo en un trabajo de investigación, así que me aventure en las calurosas calles de la ciudad,… al llegar al lugar del destino, que no era más que el mirador en donde esta el monumento al Pípila, quien aún lleva a sus espaldas una gran carga, ahí fue que pude ver las cosas como eran, pude ver lo grande que era la ciudad y lo pequeña que es mi existencia, disfrute por un momento de la panorámica que me ofrecía la casualidad y me mantuve en alerta de la llegada de mi compañera,… no pasó ni un minuto, cuando la silueta hecha a mano de Érica se avisto por el lugar, me saludo con gran felicidad y después comento.
    [FONT=Arial]-Veo que ninguna circunstancia no requerida te hizo faltar a tu promesa-
    [FONT=Arial]No sabía con exactitud a que se refería, pero decidí contestar de cualquier modo… -No comprendo, solo te digo que nada me impediría venir a ayudarte, ya que lo prometí- Una leve sonrisa roso sus labios y la atmosfera cambio instantáneamente de apariencia,… disfrazando el cielo de un tono romántico y predecible, se acerco Érica a mi, como pidiendo en silencio, algo que quería a gritos,… mis labios se sentían temblorosos, sus labios se veían esplendorosos, pero recordé… -Yo ya tengo a alguien- Y con injusta obediencia me di la vuelta y al avanzar un poco, una alma en pena me detuvo de la mano y me hizo saber sin rodeos,… -Sabes una cosa Josué,… afirmar que me siento débil cuando no estas ¿Estaría bien?, decirte que me haces feliz como nadie lo hizo antes ¿Está mal?, en pocas palabras, dime si crees que haberme enamorado de ti ¿Tiene sentido?- ¿Tenía la respuesta a esas llagas de Érica?, no sabía que decir, y mientras más duraba, más su vida despedía esas pequeñas perlas de sus pupilas, su cabello era juguete del viento y sus fuerzas escapaban sin dirección. Al darse por enterada de que no sabía como exponer mis sentimientos, Érica se dispuso a darme su última pregunta… -Solo quiero que me digas, ¿Te quedaras conmigo? o ¿Irás con María?- Definitivamente quería irme en busca de aquella que era mi primer amor, el único. –Lo siento, pero creo que iré con María, no me preguntes la razón, solo sé que a ella es quien estoy buscando- Sin palabras ni gestos, Érica me soltó la muñeca y al cabo de eso, sugirió tentativamente… -Lo entiendo, pero, sabes, te estaré esperando- Al terminar sus palabras, tome el teleférico y me encamine a encontrarme con esa persona, además creía que ahí encontraría también mi cause. Al bajarme del transbordador me dirigí con un paso sobre humano, hacia en sitio en donde supe la encontraría, ese era el lugar en donde nos conocimos, pero recordando escenas pasadas, ese mismo sitio era aquel callejón que no podía cruzar, así que me arme de un valor demoniaco y cruce sin problemas,… al llegar ahí una luz color esmeralda recubría el cabello de mi destinada y sin más preámbulos, aunque con cansancio, debo admitir, le mencione mientras descansaba un poco mis pulmones… -¡María!, te estaba buscando- La cordura de sus frases golpearon mi mente. -¿Para que?, ¿Quieres que vallamos a algún lugar?- Y me negué a su petición diciendo. –No, es solo que quiero decirte algo- Sorprendida no por mis oraciones, sino por mi seguridad insinuó. –Entonces di lo que tengas que hacerme saber- ¿Con versos es que podía hacerle entender a María? Y me fui cubriendo de una gran torpeza, aunque esa misma torpeza me hizo arrojarme directo a ella y mostrarle, no con palabras, no con regalos de mi rostro, sino con un poema de mis labios y en el interior solo me quedaba esperar que aceptara mi declaración. Al parecer ella había aceptado, porque no se resistió ante mi atrevimiento,… cuando termino el bello momento volví a ver aquella imagen de hace 7 años, en donde el cielo solo lloraba en sus ojos, pensé… -Quizás no debía haber hecho esto, ella me va rechazar ahora- Y aunque su llanto mostraba tristeza, su cara estaba llena de felicidad. Me sentí rey del universo, pero faltaba historia y ella daría el inicio a una nueva verdad o quizás la antigua… -Josué, solo quiero que lo digas una sola vez, una sola- Expresó mientras sus gotas de felicidad se evaporaban y sin pensar, sin siquiera premeditar con anterioridad a mi existencia, dije sin dudar… -Te amo- Y tome sus manos fuertes como el destino y frágiles como la seda, ella respondió, como leyéndome la mente… -Yo también te amo,… y ahora que esto pasó solo me queda decir, gracias- De pronto el ruido que nunca hubo en la ciudad se hizo escuchar, ese sonido típico de la industrialización, aquel que en mi tiempo como habitante de Guanajuato nunca había escuchado y el cuerpo de María se fue precipitando hacia el piso con aparente lentitud,… trate de detenerla, pero su peso había incrementado exponencialmente, esto solo causo que su inevitable descenso,… y aunque no pude detenerla, por lo menos nunca deje de sostener su mano derecha, cayendo de rodillas junto a ella,… entonces una especie de neblina emergió del empedrado de la calle y me impidió ver más a María, así que comencé a decir su nombre una tras otra vez esperando que me escuchara y me dijera el mío, pero no lo hacía. La neblina fue llenando todo alrededor y después de unos minutos ya no podía ver nada, y al querer alar de la mano a María me di por sabido de su inexistencia, al intentar palpar su rostro entre la oscuridad blanca no pude tocar nada y de repente un silencio abrumador rodeo mi ser por un momento… después una leve voz comenzó a sonar lejana a mi, no decía mi nombre, no era de María, pero sabía que algo me sucedería,… esa voz sonaba mayor, como de una señora y decía,…
    [FONT=Arial]-¡Hija!, ¿Vas otra vez con ese chico?-
    [FONT=Arial]Y fue cuando una voz familiar le hizo compañía a la anterior,…
    [FONT=Arial]-¡Si!,… voy a llevarle algo de comida-
    [FONT=Arial]Y la mayor decía con dudas.
    [FONT=Arial]-Debería darte por vencida, ese chico no…-
    [FONT=Arial]Ahí la voz que semejaba a la de Érica interrumpió,…
    [FONT=Arial]-Tengo fe en que sucederá algún día-
    [FONT=Arial]La habla que parecía la de una madre preocupada se resigno diciendo,…
    [FONT=Arial]-Quizás tengas razón, después de todo le has informado de muchas cosas durante todo este tiempo-
    [FONT=Arial]Aquella neblina que me impedía ver, fue desapareciendo tenuemente, mientras escuchaba la onomatopeya de unas pisadas llegar a donde estaba,… y cuando estaban justamente frente a mi, una imagen borrosa comenzó a ser dibujada en el aire, se me hacía familiar el contorno, pero no lograba comprender el fondo. Entonces esta forma se agacho y me hablo con aquella semejanza en la voz de Érica…
    [FONT=Arial]-Te traje de comer otra vez, ¿Quieres un poco?-
    [FONT=Arial]Me mostro una figura que parecía en sus aspectos geométricos un plato, ¿Qué debía hacer?, ¿Comer?,… pensé obedecer a la invitación de la forma de chica y tome en trasto, así mientras lo acercaba a mi, recobre la visibilidad al cien por ciento y logre notar que el alimento que estaba apunto de disfrutar era el mismo que había ya probado con anterioridad, aquel que hizo la diferencia en la cotidianidad de la cocina de mi madre, ahí concrete lo siguiente, ¿Tengo madre?, ¿Tengo padre?, al final no toque ni un bocadillo de ese platillo, así que voltee en dirección a quien me había ofrecido la comida y me lleve una sorpresa al ver que se trataba de María, pero entonces ¿Por qué sonaba como Érica?. Ella parecía sorprendida al verme, sin embargo la razón era ajena a mí y así ella solo se limito a decir en voz alta, pero no dirigiéndose a mí, si no a una tercera persona,…
    [FONT=Arial]-¡Mamá!, ¡Me está mirando!-
    [FONT=Arial]La anunciada madre de la joven delante de mí salió corriendo de una casa, parecía que estuviera cocinando, pues aun traía el delantal puesto.
    [FONT=Arial]-¡Que!, ¡En serio!-
    [FONT=Arial]Las dos mujeres impresionadas por algo, se postraron ante mí y se quedaron mudas, como si esperaran algo de mí y solo se me vino una palabra a la mente,…
    [FONT=Arial]-María, María, María, María-
    [FONT=Arial]La joven supuso que le hablaba a ella y me contesto.
    [FONT=Arial]-¡¿Recuerdas mi nombre?!-
    [FONT=Arial]Vaya coincidencia se presentaba, aunque mi mente aun se encontraba desestabilizada podía hacerle un par de preguntas…
    [FONT=Arial]-¿Qué me pasó?, ¿Qué hago aquí?-
    [FONT=Arial]La joven me escuchaba con atención y contestaba con veracidad.
    [FONT=Arial]-Te diría lo que te sucedió, pero para ti no tendría sentido ¿Verdad?-
    [FONT=Arial]Sabía a lo que se refería y sabía la respuesta correcta.
    [FONT=Arial]-Tal vez sea cierto, pero aun así no quiero saberlo, solo sé que ahora estoy bien-
    [FONT=Arial]Quien diría que al decir esa frase sentiría la mano suave de aquella persona que me había salvado y al voltear en búsqueda de esa persona, solo pude encontrar un callejón oscuro al final, una caja de madera y un charco detrás de mi, pero había algo más, algo que nunca vi en mis sueños y delirios, algo que me dejo atónito, algo como una caja igual a la que me tenía como refugiado, pero con la abertura opuesta a la mía, así que le hice saber mis dudas a la persona que estaba delante de mi,…
    [FONT=Arial]-¿Qué hace esa caja detrás de mí?-
    [FONT=Arial]La verdad era conocida por ella y me comento,…
    [FONT=Arial]-¿Esa caja?, esa es la caja de tu compañera-
    [FONT=Arial]Y como si supiera la continuación de su narración, por primera vez en mucho tiempo la esencia de mi alma se libero en forma de llanto, mi ser se astillo por completo y aun desconociendo el significado de sus palabras y de mi dolor le pregunte…
    [FONT=Arial]-Ella, ¿En donde esta?-
    [FONT=Arial]Su respuesta me dio calma, pero un poco de inquietud a la vez.
    [FONT=Arial]-Creo que la llevaron a un albergue cercano-
    [FONT=Arial]Al escuchar eso, demande…
    [FONT=Arial]-Quisiera que me lleven a donde esta-
    [FONT=Arial]Las personas ahí presentes esperaban ciertamente esa sugerencia de mi parte, así que se dispusieron a llevarme con aquella mi compañera que mencionaban, pero no tenía idea de quien me esperaría en aquel albergue. Al llegar a ese lugar extraño para mi, de hecho toda la ciudad me parecía extraña, al llegar fue que conocí a esa persona, ¿Quién era?, ¿Por qué se me hacia familiar su rostro?, no recordaba nada, sin embargo ella me miro y con una actitud descontrolada e intrépida, muy parecida a la de la María que conocía, se me acerco y me dijo,…
    [FONT=Arial]-¿Sabes quien soy?, ¿Me reconoces?-
    [FONT=Arial]No tenía sentido, esta vez aunque era la voz de María su molde era más parecido al de Érica, le dije,…
    [FONT=Arial]-¿Eres Érica?, mi compañera-
    [FONT=Arial]Sus mejillas se sonrojaron a un grado nuevo para mi vista y se puso feliz, me tomo del brazo, luego me cubrió con su regazo y me hablo de paz, pero ¿Había vivido esto antes?, ¿Conocía en realidad a estas personas?, fue cuando la pregunta definitiva y la que daría sentido a esta historia vino de mi boca,…
    [FONT=Arial]-¿Quién soy?-
    [FONT=Arial]Nadie me quería contestar la pregunta, más bien nadie parecía saber la respuesta y ahí fue cuando fui rápido a un espejo y me vi por primera vez, sin duda era yo, un cuerpo esbelto, un cabello imperfecto por la suciedad, dientes comenzándose a ver amarillentos, piel pálida por la falta de ingesta de alimentos, la ropa rota en representación del tiempo que tenía de esa forma, aunque mi edad era la misma, todo mi ser parecía tan distinto o más bien ahora era el verdadero. Al verme de esa forma, comprendí que algo me había pasado y que ahora no sería como antes, no habría anterior María, ni anterior Érica, no estaría aquella Érica que rechacé lamentablemente y aquella María que bese con mi alma, no estaría aquella ciudad en la que me vi crecer, aquellos maestros que no sabían comprender a los estudiantes, aquella casa en donde mis padres me alimentaban y donde María me visitaba, aquel lugar en donde ella misma me había rescatado de la corriente del rio improvisado, entonces,… ¿Qué estaría esperándome afuera?, mientras todo lo que recuerdo son solo versos en la mente de un vagabundo que quiere sobrepasar su nivel económico en una sociedad tan inestable, pero no se puede descartar la posibilidad de que ahora mismo este soñando una realidad paralela a la mía y aun cualquiera que fuese la verdad, ya sea esta o cualquier otra, mi vida aun no tendría sentido,… sin embargo estando así como estoy ahora, ¿Estoy bien?[/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/FONT][/LEFT][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial][FONT=Arial]


    [LEFT] [B][I][FONT=Arial]Una gran cantidad de leyendas y mitos se cuentan alrededor de las grandes ciudades y de los pueblos en donde se llevaron acabo grandes batallas, o donde tomo parte la historia, pero dejando de lado los sucesos marcados en los libros de historia, hay también sucesos que aunque no son muy conocidos, pudieron haber sucedido o quizás no y aun así se siguen escribiendo anónimamente,… Tanto puede que si suceda puede que no, según el la afirmación de Schrödinger, “Mientras haya algo que no te deje ver la verdad, lo que ves puede ser verdad o mentira”, así que probablemente aquí no termina esta historia.[/FONT][/I][FONT=Arial][/font][/B][FONT=Arial]
    [/font][/LEFT][FONT=Arial][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font][/font]
     
    #1
    Última modificación: 23 de Septiembre de 2010

Comparte esta página