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Viaje A Europa

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por Jcmch, 22 de Septiembre de 2006. Respuestas: 2 | Visitas: 1050

  1. Jcmch

    Jcmch Poeta veterano en el portal.

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    Europa, la segunda luna de Jupiter




    Me encuentro ahora en esta desambiguación bipolar, por llamarla de alguna manera, en la cual mi memoria y espíritu universal se posan en dimensiones extrañas. Es más que todo una de esas formas que tenemos algunos de escapar de la soledad; no de esa soledad necesaria y voluntaria a la cual de vez en cuando optamos para alcanzar sabiduría, el “ermitañismo dialéctico” diría yo. No hablo de eso. Sino de esa sensación de vació…ese miedo amargo y frío que se posa en nuestra racionalidad; son momentos de infinito desamparo y dolor. Pero… ¿Qué es la soledad? Pregunta difícil de responder. Es un estado personal que podría definirse de seis o siete mil millones de maneras, una por cada habitante de la Tierra.

    Un día desperté y el planeta Tierra había explotado. El calor de las guerras atómicas y el efecto invernadero provocaron un cataclismo parental. Las montañas se doblaron, los mares hirvieron y burbujearon, llovía sin agua, los cielos cayeron en pedacitos como motas de algodón azulado. El mismo día del estallido los cuatro jinetes del Apocalipsis decidieron dar un paseito, cabalgando junto a las Valquirias del Walhala…haciendo las pícaras travesuras que habían deseado hacer desde hacía milenios; esas travesuras que hace cualquier monstruo apocalíptico: hundir unos poquitos cientos de ciudades, matar sanguinaria y horriblemente solo un puñadito de miles de millones de pecadores malditos…ya ustedes saben…las travesurillas inofensivas de las pequeñas bestias celestiales. Allá en los cielos terrestres, Dios y Ala estaban sentados en sus sillones más confortables, saboreando unas saladas y deliciosas palomitas y golosinas; por supuesto, hay que ponerse cómodo y disfrutar del show…no todos los días se destruyen planetas y se hacen juicios finales. Mas lejos, Visnu jugaba alegremente con Buda…lo único que no podían jugar era Palmaditas, creo yo, porque el buen Vis tiene seis manos…y es medio tramposo. En fin...estos dioses terrestres si que se saben divertir.

    Cuando la Tierra hubo estallado en mil pedazos, y los restos esparcidos por la Vía Láctea como inmensos y solitarios meteoritos de dolor, salí de mi meditación milenaria, en la cual estuve sumido después de mi muerte, y me encontré entonces vagando por el Sistema Solar, flotando entre la belleza de las constelaciones del zodiaco…y disfrutaba de ellas cual obras de arte dibujadas en el lienzo infinito del tiempo y el espacio. Pude recorrer los nubosos y enormes planetas deshabitados que veía. Júpiter lucia como un interminable espectro de edades perdidas, de imágenes torcidas…de cuentos olvidados…me causó temor observar su efigie monumental en el abandono y la negritud del espacio. Pero rápidamente se alejo de mí ese pensamiento para adentrarme a bailar en los anillos de Saturno, sumergirme en las playas químicas de Neptuno y Urano, y probar mi recién comprado abrigo de oro lanudo en las heladas pléyades de Plutón.

    No se por cuales artes del destino un ser humano se pierde en la sordidez de sus temores. No es un lujo pensar en la muerte ante lo cual nos sentimos indefensos. Ahh…tiempo…vida. Un soplo de vastedad en la ignominia del ser y estar. Un vasto núcleo de olvido y sinsabores que se cruzan con la felicidad. Son esos miedos los que se cuelan en el destino y lo corroen…como orugas a la morera.

    Algo me impulso hacia atrás nuevamente, hacia Júpiter. Una fuerza superior a mí me tomó en espíritu y ánimo corporal al poderoso astro de trueno y señorío olímpico. Esta vez vi un puñado de lunas que danzaban a su alrededor. No eran brillantes y melancólicas como la de la Tierra, el más hermoso satélite que en el universo se ha de conseguir. Estas eran lunas antiguas, en ruinas, secas y opacas…como una mujer sin autoestima. Pero había una…solo una…tan blanca y lisa…tan perfecta como el lomo de un narval. Se escuchaban poderosos océanos de agua dulce en su interior. Esa era Europa, la amante perdida del Zeus ateniense…una diva del espacio sideral. Tan novia de la belleza y de las artes como el viejo continente de mí liquidado planeta.

    “Esta luna…esta soledad…este misterio…esta paz”. Me dije. Una serenidad sin sentido pululaba en los suelos helados del satélite…y un sorbo de vida se alzaba por entre los helados aires europeos. “Aquí me estableceré” me dije. Al fin un estado de civilidad, un verdadero hogar…lejos de la condición humana y de sus sectas patriarcales.

    En ese instante me recosté y cerré mis ojos por décadas, siglos…milenios…el tiempo y el espacio recorrían su mirada por mi cuerpo, sin tocarlo; era yo un sorbo de la naturaleza perdida del hombre, que se aferraba al ideal de la conciencia, mas que al de la razón. Pero lentamente, me fui cerciorando que todo se hizo monótono; fui notando que la vida regresaba a sus estados capitales…que la carne y la piel se coloreaban con avidez. Las aceras sucias y los vientos raudos comenzaban a surgir. Los carritos de perros calientes iluminaban un asfalto naciente. Por toda la superficie europea los edificios explotaban la capa de hielo y afloraban: rascacielos, apartamentos, iglesias, casas. Los autos y sus timones rodaban…llegaban o aparecían de pronto ante la vista. Un repentino alboroto cegaba mis sentidos. Me daba cuenta que la paz y la autoconciencia que pude conseguir se esfumaban sin más, mientras las ciudades crecían y nacían del suelo de Europa.

    Luego, la gente. Con todas sus familias, sus perritos, sus trajes, sus computadores, su ignorancia, su perdición. La plaga comenzó a cubrir los suelos, y el firmamento al fin se corono de azul. El mundo de donde quise escapar jamás me abandonó. Siempre lo tuve en mis ojos.

    Si muero, se acaba para mí, pero sigue su curso para los demás. Cada muerte es un Apocalipsis, y cada Europa…la esperanza de la vida.
     
    #1
  2. hadita

    hadita Poeta veterano en el portal

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    ayyyyyyyyyyyyyy
    quiero un viaje asiiiiiiii y conocer el mundo entero

    hadita

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    #2
  3. Jcmch

    Jcmch Poeta veterano en el portal.

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    Gracias Hadita...aprecio mucho tu comentario...Te mando un beso enorme...
     
    #3

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