Vino la censura II

Resabio del franquismo y ciega bota,
forúnculo decrépito y malsano
del noble sitio, intelectual enano,
¡qué poco has entendido a Efejota!

Brillantez de mosquito y de marmota,
el novio de Manuela, siempre “a mano”
con la crema moral y el Vaticano,
¡flagelo de la izquierda y gran patriota!

¿En dónde debutaste, botarate?,
¿por la puerta de atrás, con un pepino?,
¿con la fiel vecinita del mal paso?

¿Cuál será tu siguiente disparate?,
¿censurar la esperanza y el buen vino?,
¿paliar la inanición con Garcilaso?

 

Asombrado me has dejado. Gracias por tu apoyo con este inesperado y afilado soneto, que mejora con clase y estilo mis humildes octosílabos.

Un afectuoso saludo.

 

Muy bueno este satírico soneto, Elfie, dentro de la más pura tradición de la que nuestra poesía en lengua castellana tiene muy brillantes ejemplos de grandes poetas, como Quevedo, sin ir más lejos.
Para el que sepa traducir tus metáforas (además de leer entre líneas) es un soneto que lleva de sonrisa en sonrisa.

Gracias.

Felicitaciones y un saludo cordial.

 

A veces me pregunto si merece la pena la censura por las obras a las que da lugar, este es el caso, me ha parecido tremendamente bueno tu soneto.

Saludos cordiales, Oncina.

 

Mi aprecio, Don Oncina. Gracias por las finas atenciones que me ofrece.

 

La sonrisa de mis colegas no tiene precio, estimado. Respetors, y gracias por su elogiosa lectura.

 

P

Para eso estamos, estimado. Hemos soportado el oprobio de la censura en exceso. Saludos.