Visión III

Todo fue repentino,
en medio de la rutina lineal y amarillenta
un temblor desconocido despertó bajo sus pies desconcertando los rumbos distraídos,
olas inmensas golpearon lugares nunca antes alcanzados por sus líquidos tentáculos en un avance inexorable
lejano aún

pero había entre aquellos humanos miradas serenas y una confianza que los invadía uno a uno tan rápido como el viaje de un sonido,
la calidez cruzaba por los puentes que formaban con abrazos ,
se expandía como luz
nadie nombró al miedo como parte de la escena
todos vivían la belleza de aquel oleaje desatado que cruzaba las fronteras por ellos construidas ,
que arremetía con furia contra sus ídolos mudos ,
ahora insignificantes ,
que simplemente extinguía sus señales en la tierra

No lloraron , no temieron
Nada habían perdido

 

Esa nueva ola es la que espera este mundo, pero para ahogar lo superfluo, y lavar lo auténtico.
Un gran poema. Felicitaciones.
Un gran abrazo

 

Los terremotos son espantosos,
Sin embargo presentas la obra desde un punto de vista muy diverso al trauma del caos.

Unas olas muy agradables y serenas.

Saludos
Lex

 

Gracias poetas!