Llorando en la ventana

Quise escribir un verso la otra tarde,
que hablara de nostalgias y campanas,
de amores renacientes y palomas,
de puertos olvidados y distancias,
pero ha pasado un niño por la calle...
y lo quedé mirando en la ventana.
Era un niño de unos siete años
llevaba con trabajo una canasta
como un dolor a cuestas, parecía,
al ir tocando timbre por las casas.
su espaldita quemada por los soles
tenía el cansancio que solo se compara,
cuando uno ha trabajado muchos años
o ha atravesado un tiempo por la lágrima,
era un cansancio de esos que se encuentran,
cuando duele, mirando, la mirada.
Entonces me volví, niño, a mi tiempo
cuando sólo las naranjas nos pesaban
porque eran soles robados a la siesta,
travesuras inocentes de la infancia.
Quise escribir un verso la otra tarde
que hablara de navidades esperadas,
pero ha pasado un niño por la calle...
y lo quedé mirando en la ventana.
Quise salir corriendo, para darle
la alegría de venderme unas naranjas
comprarle un kilo, dos, porque tuviera
una venta que le alegrara el alma;
Pero había un padre, esperándolo en la esquina
con un carro lleno de canastas,
mientras él miraba, el niño iba y volvía,
en su interminable andar, como si nada.
¡Ah, esclavitud doliente por las calles!
¡Ah, tristeza nunca denunciada!
Habráse visto, autoridad de padre!
e ignorancia de un dolor en la mirada.
¡Demagogia de discursos navideños
con el hambre correteando en las espaldas!.
Volví hacia adentro, triste y abatido,
portando en mi mano tres naranjas
como tres soles quemándome la sangre,
como tres penas doliéndome en la palma.
Pensar que compré, por tres monedas
esta angustia que hoy me llena el alma.
Quise escribir un verso, la otra tarde,
que hablara de navidades y campanas,
pero ha pasado un niño por la calle...
y me quedé llorando en la ventana.

Marino fabianesi​

 

Buenas noches Marino:
es una belleza tu poema,
tierno, dulce, melácolico, en
fin me agrado bastante
un abrazo grande y mis estrellas
Carmen Manrique

 

te agradezco carmen, de corazón

 

uff, poeta, que magnifica poesia, tan profunda, tan verdadera, que duele, duele y mucho, pero a la vez ensalza la poesía, pues tu pluma magistral vuela sobre ese cielo de tristezas. bello, bello!! y gracias por compartirlo. abrazos y estrellas para ti compatriota!!

 

encantador,profundo y excelente tu poema, que mira hacia lo verdaderamente importante

 

Gracias Maria, por acercarte a este poema muy profundo para mi, por la realidad que intento pintar en el.
Un abrazo...Marino.

 

Gracias Antonio, no sé si mira hacia lo importante. Quizas lo importante para uno sea insignificante para otros, yo escribo a veces para lo que me duele, y lo denuncio.
y a veces me acuesto un poco mas tranquilo...solo hasta que me levanto.
Un abrazo, Marino.

 

El trabajo fortifica el espíritu, la explotación lo doblega. Conmovedor y hermoso poema

 

Bella demostración de sensibilidad social y humana, excelente poema que te enaltece. Un abrazo.

 

Gracias, Z Gómez, es un gran halago tu visita, hermosas tus palabras y tu reflexión.
Un abrazo...Marino.

 

Clara, me he enterado de lo que dijistes al papel, y ciertamente tu maravilloso espíritu
me ha inundado hasta lo mas profundo de mi ser. Te agradezco querida amiga por dejarme conocerte y por todo lo que me das, con tus visitas.
Un beso...Marino.