Ecos de Allá Arriba

No te aferres tanto a la vida,
al fin y al cabo no saldrás
vivo de ella.

Encantado con la
libertad del aire en el bosque,
a dos o tres metros
del vacío exacto,
penetro en la
extensión del horizonte,
en el depósito
de las almas muertas,
enarenado, apagado,
túmido, blando.

Pasos vertiginosos
sobre el mármol,
las paladas
mecánicas para asustar y
que no se de,
posiblemente,
el nacimiento de
la hierba fresca.

Juraría que es mediodía,
todo en este
lugar es chispeante,
desconfiado,
todavía intacto al amanecer,
resonancia en la noche
con el mismo volumen,
ecos de allá arriba.

El temido hoyo,
donde juega mí cuerpo,
el juego es el duelo,
el juego en el bosque,
porque la muerte vino.

 

Un Poema que me ha hecho pensar... me parece el trance de un alma en los umbrales de la eternidad...
Lindas metaforas...

Sebastian

 

siempre es un placer visitar su talento...un abrazo infinito...

 

muy bello poema,a pesar de lo gotico,es una linda metafora de imaginarse sintiendo la muerte,saludos y estrellas.

 

En la muerte creo.

 

Parece que está cerca la muerte, eso me pareció que se reflejaba en el poema,me gustó el escrito sobre todo porque me dejó pensando...Un lindo saludo y mis estrellitas!!!Rosa Reeder

 

Hola Rosita, ni tan cerca ni tan lejos.
[FONT=&quot]Querida Muerte[FONT=&quot]


“Tarda en venir a este dolor a donde vienes,
a este mundo terrible en duelos y en espantos,
sueña bajo los ángeles, duerme bajo los santos,
que ya tendrás la vida para que te envenenes.”
(Rubén Darío).


Vienes de allá donde la paz impera

a buscar un nuevo amante.

Si traes manos,

que sean suaves,

si traes ojos,

que no me miren,

no quiero sentirte ni que me veas,

ni dicha ni dolor,

querida muerte.

 

100 de cada 100 humanos, muere… entonces, yo también creo en la muerte, caso contrario, hasta que me desaprueben lo anterior.
Buenos versos. Me gustaron.[FONT=&quot]
[FONT=&quot]Abrazos[FONT=&quot]
[FONT=&quot]Chepeleón

 

El miedo a la muerte es esclavitud

 

Cierto, sin discusión.

 

También debes creer de acuerdo a las cuentas de Chepelón

 

Por un momento leí túmulo. Gracias mi amigo

 

Sin temores...