Mi Dulcinea

Mi Dulcinea​

Ella era la gloria de mis días,​

con ella siempre soñaba despierto,​

su abrazo para mí era una eterna alegría,​

no recibirlo era una vil agonía;​

la perdí, no sé cómo pero así es,​

poemas aún le dedico,​

perdón aún le suplico,​

diosa mía,​

estrella, la de los ojos que aún brillan en el cielo,​

imagen brillante que quiere que escoja entre el bien y el mal,​

solemne alma tocada por los placeres de la sociedad,​

y qué es de ella en Izalco, más que un recuerdo impregnado,​

en este pobre y falso hidalgo.​

Vlad Kanon​

 

Bueno creo que eso no es tan facil de explicar y buscarla es otra complicacion mas, pero otra damicela en estos momentos espera por mi no es lo mismo pero su compañia me es grata un gusto tenerlo por aca y muchas gracias por sus gratas palabras. Saludos.

 

Más vale pájaro en mano que ciento volando, te rectifiqué una letra, te la comiste.... un abrazo

 

Como dicen los de mi tierra... ¡Ta perra el hambre!, fue un descuido lo de letra ya lo corregí muchas gracias por el aviso, y de igual manera tan peculiar frase de comentario. Saludos.