Ansiar Postrero

Como viento incansable de continuo fluir,
como eterno lucero de perpetuo alumbrar,
cual la constancia eterna de las olas del mar,
!quisiera nuevamente empezar a vivir!

No obstante, martirizan mi ser acongojado
ilusas vaguedades y negros pensamientos.
!Hace tiempo vivo huyendo desahuciado
vagando entre las sombras y los vientos!

Quisiera olvidarme por siempre del ¿Por qué?
posponer la razón por infundada,
olvidar lo que existe y lo que fue,
y perderme imprecise entre la nada.

Execrar de mi mente el pensamiento,
deshacer lo que resta a mi existencia,
disiparme cual cenizas en el viento,
!sellando así la voz de mi conciencia!

Ansié las quimeras que una ves soñador,
volvieron primaveras mis noches de tenor
Y al buscar nuevamente vestigios del amor,
en el fondo del alma tan solo halle dolor.

Y se murió en mi pecho por siempre el sentimiento,
y enmudeció mi alma con un silencio estoico.
Mis creencias y afanes se hicieron solo viento
Como la indiferencia de algún beduino laico,

Pues, en vano se engaña mi ansia ya postrera
mi vida es una vela que apenas languidece
mientras la consume la llama que no espera
que la derrite y la desaparece.

Tan solo queda un plato guardando un contenido:
la cera que blandiera su resistencia ufana
que acusa y testifica en pro de lo que ha sido,
derretida en el fondo tras resistencia vana.

No importa cuanto intente empezar a vivir,
mis ansias se han perdido tras un triste anhelar
Mi corazón ajado se niega ya a sentir.
Mi corazón erróneo se canso ya de amar.

Y aunque mire las olas con su vaivén constante
Y contemple el brillo de un brillante lucero
Reconozco que soy un fugaz caminante
Que se perdió en la triste jornada de un sendero.


Carlos K. Ricart

 

Estimado Ricart, tus cuartetos que encuentro muy meritorios y de una calidad que demuestra tu oficio poético,
tienen algunas irregularidades:
No hay homogeneidad en la métrica de los versos,
alternando diferentes medidas sin una estructura clásica conocida;
Veo que mezclas cuartetos con serventesios, sin regla fija;
Entre tus excelentes alejandrinos, se escapa algún hemistiquio de 6 sílabas,
y hay algunos acentitos faltantes,
(*) Se acepta el hiato "y enmudeció mi-alma", por estar antecedido de una palabra aguda, fuertemente acentuada que da lugar a una cómoda separación de sílabas y correcta ubicación de los acentos en el escandido.
(**) "que la derrite y la desaparece. (11 sílabas) sus acentos (4-10), no son lícitos, por quedar un vacío de acentos indefinidos.
Por ahora NO APTO;
un saludo cordial, edelabarra