Nada-.

Pasar por una puerta,

por la que ya se ha pasado,

y no hallar sino la mentira

y la hipocresía, vistiendo

sus inútiles aperos. Es que,

acaso, algo ha cambiado,

en este bendito país? No,

te atreves a decir, nada,

si fueras más valiente.

Continúa siendo, mayoritaria,

la sociedad rural y rudimentaria,

volátil y pazguata, siempre llena

de prejuicios y rayana en lo estúpido.

Pasar por esa puerta, y observar

el inútil paso del tiempo, devorando

las jambas, los techos, los inservibles

artesonados: es ver pasar la vida

tragándose la rabia-.





©

 

... O tal vez es que no se avizora ninguna alternativa que valga la pena, mi compa. Y así las cosas, la estupidez no es solamente más económica que la inteligencia responsable de la realidad, sino también más sabrosa.

Excelente poema-reflexión, por cierto.
Y sí, hay certezas muy tristes.

 

Muchas gracias César. Un fuerte abrazo Amigo!