Ramillete de violetas

Última fibra
del hueco de mi alma

latido perdido
que me falta como sangre
en la herida que no sana

tu destino es una aurora

que no nace​

ramillete de violetas

—en pimpollos—

bajo escarcha​

sobre la playa
en tu mar de verano
tiemblan las estrellas
como grillos de nieve

y soy yo​

que te contemplo

y es el cielo, Alejandra

que te busca
como una pléyade extraviada

de a ratos nombra
tu arena bulliciosa
mi lejana lejanía

y abeja en el diluvio
vuelvo hasta tus manos
cada vez que vibro
como una cuerda olvidada

yo te pienso
como un labriego que consagra
todo el trigo de sus surcos
y el pan de su molino

(amamantado en tus lunas
mi corazón tiene tu voz

y tu fatiga)​

yo te pienso
con el terror que asalta
ante una puerta cerrada

y con la fuerza del golpe

que la estalla​

te pienso con el miedo de nacer
y la alegría de morir
para volver a ser un niño

con la carne de tu carne
se hizo mi camino a las estrellas

y lo sé​

este misterio incomprensible
tejido en desencuentro
nos destroza las entrañas

como un río
que desemboca en una cárcel
como cuchilla es esta vida
que me aparta de tu espalda

las flores solo tienen dientes
y los árboles
golondrinas amargas

cada paso que te aleja
es una lápida
enmarañada por la bruma

y lo que fue hechizo

de gemido y lágrima

apenas​

una instancia más

de la locura impávida

 

Gracias, @Narablus por dejar tu huella.
Dani.

 

Gracias @Medusa, querida Romi, por dejar tu huella.
Dani.

 

Muchas gracias, @Robsalz por dejar tu huella.
Dani.

 

Maravilla de poema, me estoy haciendo adicta a leerte.

 

¡Gracias, Luciana!¡Qué lindo comentario! Un honor que me leas. Abrazo.
Dani.

 

Es tan bonito como triste su poema. Qué lindo escribe! Saludos

 

Lindo es que personas jóvenes y talentosas como vos, lean mis humildes intentos poéticos, @La Espartana. Gracias por leer y por la delicadeza de comentar.
Dani.

 

Precioso poema estimado Solaribus. Un abrazo con la pluma del alma