Todo era silencio y quietud.

Los postes del alumbrado
con su único ojo de cíclope
se quedaron quietecitos,
vigilando, sin parpadear,
los inútiles intentos por huir de nuestras sombras.

La luna en su lontananza
se tapó la cara con las nubes,
las estrellas detuvieron su titilar:
habían cesado los motivos
para el aullido de los perros
y el canto de los grillos.

Los árboles apenas y respiraban.
Las hojas no respetaron las leyes de gravedad,
tímidas se aferraron a las ramas
y el viento suave desistió de sus afanes.

En este marasmo nocturno,
sólo mis manos y labios
no dejaban de temblar como epilépticos
por culpa de tu beso;
por culpa del roce de tus labios,
mariposas en agonía.

 

QUE BELLEZA DE POEMA. TE FELICITO. UN FINAL CON BROCHE DE ORO.
RECIBE MI ABRAZO CONGRATULANTE Y MIS ESTRELLAS
FELICIDADES.
ENRIQUE

 

Enriqueqc:
Agradezco mucho tus comentarios y vaya hasta tu tierra un saludo de año nuevo.

 

Maravilloso!!!!!!!... Te lo aplaudo...

 

Savasppcc:
Recibo con agrado los aplausos cuando vienen de alguien que escribe como tú.

 

Un bello momento retrata su poema. Ya sabe que admiro su letreo ... estrellas y abrazos de frutas tropicales ..

 

Mujer azul:
Cuando besas al ser amado, se paraliza todo, no transcurre el tiempo y la lluvia deja de caer y sólo existen los labios en un ahogo eterno. Gracias por ayudarme a paralizar todo cuando relees mis palabras.