Lo oculto tras mis saladas lágrimas

La sal cae sobre mis heridas,
las lágrimas no aguantan el peso del dolor
y caen teñidas de rojo ..

La desesperación me ahoga y me hunde en la melancolía,
la rabia me saca de quicio y me tienta con cuchillos y navajas,
la oscuridad me llama a lo prohibido
y mi alma está rota hace ya mucho tiempo.

Mis heridas se habren con cada mirada tuya,
mi corazón contaminado te busca por cada sentimiento,
¿Es capaz de parar y dejarlo todo hasta aquí?

Tu voz desafiante me ensordece y las otras voces me atacan otra vez,
mientras la sal sigue acumulándoce en mis heridas
tu sigues exijiéndome que me esfuerce por aquellas cosas que no alcansaré a disfrutar ...

Y te odio cada día y te acesino en cada cerrar de ojos,
la distorción se apodera de mi imaginación
y a mi corazón ya no le queda amor ...

Oculto tras mis lágrimas todo ésto y mucho más
y sin medir mi odio te quiero poseer,
quiero sentir tu dolor y el mío juntos ...
esperando morir a cada segundo.

Miro el cielo buscando alguna respuesta,
o quizá esperando que algo gigante caiga sobre mí,
Y cada vez que te extraño se amontonan un ´sin fin de sentimientos,
y cada vez que te pienso todo dentro de mi alma se pudre.​

 

sentimientos secos, así como cuando al pasar las horas el rostro antes humedo queda manchado y uno se mira al espejo y dice, basta. Todo pasa, el odio es altamente mutable con el amor.
un delito no haber pasado.

K

 

¡Qué tonalidad desgarrada, qué amor apache y pasión gitana! Hay mucha gitanería en la construcción verbal y gesticulatoria del poema. Y, ciertamente, me gusta porque hay gente así, especialmente, cuando ya son muy jóvenes o fracasan de viejo en su deseo de ser amados.

carlos

 

gracias por sus comentarios

 

sos una nena, con hermosas palabras para expresar el triste sufrimiento de amar; lastima que lo hayas experimentado a tan temprana edad.. Un placer leerte.

 

gracias Rosyemí

 

Acaso será que amas tambien el dolor?

bello poema,
un gran abrazo.

Dian-

 

Es extraño, pero del dolor se saca provecho y tal vez siento cierto gusto por el dolor.
Gracias por comentar