Dezplazado

DESPLAZADO

Y las papayas,
esas papayas grandes y amarillas como crepúsculo
que crecían desde casi de la raíz, hasta lo mas alto del palo,
quedaron dejadas.

Y las piñas,
esas piñas dulces,
piñas de aromas verdes,
que con su néctar hacía mas feliz la vida,
allá quedaron plantados.

Y las naranjas,
esas naranjas crecidas
que invitaban a compartir el dulce amor.
Allá quedaron abandonadas.

Y los yucales,
esos yucales hermosos
como el cielo azul.
Allá quedaron bajo tierra escondidos.


Y la vaca,
la mansa vaca amarilla
que ordeñaba mi mujer todos los días
Y daba una leche tan blanca y pura
tal orquídea en bosque virgen;
allá, abandonado quedó mi animalito.

Y el rancho,
ese nido de amor de bahareque y techo de palma
donde el amor fue polen de flor
la pasión una canción,
la ternura un arrullo de locura,
allá quedaron abandonados.

Y mi familia,
Ellos, mi esposa y mis hijos,
por las calles de la ciudad
abrigados por el aroma de la miseria,
Y las fragancias tristes de las necesidades primordiales.

Solo la soledad me guía,
sin rumbo, por la ciudad de corazón atado,
buscando un nuevo cielo,
como cualquier humilde desplazado.


Luecamon

 

Padre de Dios!
Que poema más lindo!
Me encantó que hablastes de frutas.
Yo adoro frutas!
Y todos los recuerdos...
Pero el final quedó triste, he?
Felicitaciónes, amigo!

 

Amigo, cuanta verdad destilan tus versos, cuanto dolor nos causa el verlos reflejados en cada acera, en cada calle de nuestras ciudades, de nuestros pueblos...

Mis estrellas para tu denuncia, para tu reclamo, para tu verdad...

Un saludo

 

Poeta Emanuelle, que estímulo que pasaste por desplazado, vivimos en un pais donde hay muchas frutas, reciba un saludo dulce y de aromas de frutas de mi tierra, con respeto y admiración, luecamon.

 

Poeta Big Bear, estimulante tu comentario, nuestras letanías son los aconteceres diarios y eso también lo cobija a cada uno. Añoranzas al tan grande Buenos Aires cuando la visité, esas monstruosos avenidas, esa recoleta donde las huellas siguen intactas de quienes al guna vez fueron, en fin, reciba un saludo de esta tierra tropical, con respeto , Luecamon.